Por Amaury González V.
En un contexto donde algunos intelectuales “de izquierda” vienen planteando una discusión cuya idea central es que América Latina estaría llegando al “fin del ciclo progresista”, y donde indistintamente de lo que dicen estos analistas existen señales evidentes de una política, bien articulada, orientada a lograr una restauración conservadora en la región, los resultados de las recientes elecciones presidenciales en Argentina ― el próximo ballotage― y las venideras parlamentarias en Venezuela, serán determinantes para futuro de las democracias populares de la región.
En una reflexión sobre los cerrados resultados de las presidenciales, el venidero ballotage y la pérdida histórica del peronismo en la provincia de Buenos Aires, este jueves la presidenta CFK se preguntó sobre el significado de esta segunda vuelta y, más generalmente, lo que significaba elegir un nuevo presidente: “¿Es solamente un nuevo presidente el que vamos a elegir?” Para Fernández, más que elegir a una nueva persona para un cargo, se trata de la escogencia de “un modelo de país y de políticas de un país”. Del mismo modo, en abril de 2013 elegir a Nicolás Maduro significaba la elección de un modelo de país y de hacer política, y el mismo significado tendrán las del 6-D, salvando las distancias.
Efectivamente, en los últimos años hemos sido testigos de las similitudes y simultaneidades en los ataques al gobierno de los Kirchner y al Gobierno bolivariano: medios de comunicación y empresarios convertidos en actores políticos, movilización de las clases medias-altas para protestar contra el Gobierno, promoción de la violencia en las calles, campañas mediáticas de descrédito articuladas internacionalmente y enfocadas en temas como la seguridad ciudadana y la economía, especulación con los precios de bienes y servicios, resultan elementos claros y elocuentes. Más recientemente, hemos presenciado como los líderes políticos opositores al Gobierno nacional-popular de CFK y de quien representa su continuidad, Daniel Scioli, han asumido la misma estrategia de la oposición en Venezuela: usurpar el lenguaje y el discurso tradicional de las izquierdas.
También, durante las semanas previas a las elecciones del 25 de octubre, la oposición argentina implementó la misma anti-política que la derecha venezolana tiene tiempo exhibiendo: atacar sistemáticamente al sistema electoral.
En tal sentido, en un momento de su discurso, CFK hizo un paréntesis para desagraviar el Sistema Electoral Nacional, después de que, como en Venezuela, la oposición se ocupara de vociferar que habría fraude en las elecciones para generar un clima de desconfianza en el árbitro electoral, cuyo sistema propusieron incluso cambiar completamente semanas previas a los comicios. Al referirse al tema, CFK reivindicó la confiabilidad del uso de la boleta electoral, la cual ha sido históricamente usada en Argentina sin que haya sido puesta en duda su transparencia ni cuestionado su funcionamiento, como se ha hecho recientemente.
Todos estos elementos permiten constatar que, efectivamente, existe una estrategia bien coordinada para que la situación producida por la desaparición física prematura de Kirchner y Chávez, líderes que protagonizaron la primavera política latinoamericana de principios de siglo, aunado a una situación económica adversa producto de la caída de los precios del petróleo (En el caso de Venezuela), entre otros factores, se convierta en un “fin del ciclo progresista”. El analista Juan E. Romero, se ha referido a esta política restauradora en curso como la “estrategia rollerback de Obama”, y el parcial desenlace electoral en Argentina sería una prueba más de los resultados que viene arrojando dicha política, en el propósito de instalar de nuevo en el poder a pro-cónsules complacientes que permitan renovar las orgías del saqueo de nuestras riquezas naturales.
No obstante, hubo un elemento que no nos pareció muy oportuno en el discurso de CFK: la forma en que la presidenta desagravió al sistema electoral de su país, la cual por cierto no estuvo para nada lejos de ser un buen argumento, visto en contexto.
Desde el punto de vista técnico, el sistema electoral argentino, a diferencia del venezolano, es el manual tradicional. Y así como en Venezuela se reivindica el uso del sistema automatizado por haber demostrado su eficiencia y confiabilidad, Fernández hizo lo propio con el uso de la boleta. Sobre el voto y el acto ciudadano de votar, dijo: “Yo no voy a permitir que me lo robe nunca ninguna máquina ni ningún sistema, no me quieran convencer…”. Además, agregó que en caso de que alguna vez el parlamento argentino decida cambiar el sistema electoral por uno en el cual el acto de votar consista en “apretar un botón”, seguramente ese día “no iría a votar.”
Relata la presidenta, que su opinión se vio reforzada luego de una conversación que sostuvo en Rusia con Edward Snowden, el famoso hacker quien reveló los planes de vigilancia masiva de Estados Unidos y quien le habría asegurado, dados sus conocimientos informáticos, que todos los sistemas electrónicos son de alguna forma violables. Ahora bien, indistintamente de que Snowden tenga o no razón en su planteamiento, el sistema electoral venezolano es uno de esos que funcionan apretando botones, y hasta ahora ha dado suficientes pruebas de su efectividad y transparencia. Como dijimos más arriba, el argumento se comprende en su contexto, que fue el de un discurso brillante, que desde nuestro parecer tuvo el carácter de severa advertencia frente a la posibilidad de que se “desmorone” todo lo logrado en la llamada “década ganada”.
CFK afirmó que se despedía con el honor de haber sido la presidenta más votada después de Perón, y pidiendo a sus adversarios “sinceridad y transparencia en el debate, y que nadie se disfrace de lo que no es”. Y es que, realmente la estrategia del contra-progresismo ha sido la misma aquí, allá y acullá: sofisticadas estrategias de marketing en el marco de la adopción de un lenguaje progresista; combinación que se nutre oportunamente de los errores de los gobiernos, que además no se han mostrado, si seguimos los análisis hechos hasta ahora, lo suficientemente autocríticos.
El panorama luce complejo, y tanto es así, que bien vale la pena finalizar con una de las frases de CFK: “Que a nadie el árbol le tape el bosque”.
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Posturas críticas, reflexivas. Opinión profesional de rasgos independientes. Aportes con sustancia. Contexto despolarizante
sábado, 31 de octubre de 2015
jueves, 29 de octubre de 2015
Juan E. Romero J.: Elecciones en Argentina: lecciones para Venezuela
Las recientes elecciones de 1era vuelta, en la Argentina, permiten hacer un análisis en perspectiva comparada, entre lo ocurrido y lo que se avecina en Venezuela. Ahora bien, toda comparación tiene una base común. En este caso, es el modelo de democracias populares – o radicales, tal como lo denominan los tanques pensantes norteamericanos y europeos- que existe, con variantes en ambos sistemas políticos. Los líderes constructores de ambos proyectos - ya fallecidos- Néstor Kichner y Hugo Chávez, levantaron una estructura de apoyo popular, de profundización de la democracia, de ruptura con viejas prácticas neoliberales perturbadoras y cuyos herederos (Cristiana Kichner y Nicolás Maduro) han tenido serias dificultades (internas y externas) que afrontar.
¿Qué caracteriza estas democracias populares y radicales? En primer lugar, una ruptura con las tradicionales élites políticas que hegemonizaron los respectivos sistemas electorales. En el caso de Argentina, el peronismo da para todo. Hay peronistas de derecha (suena un exabrupto, pero hay que recordar al ex presidente Menem), peronistas de izquierdas, en fin, una variedad ideológica. En el chavismo, hay sin duda una derecha endógena, que atenta contra la propia construcción del socialismo a través de su burocratismo, clientelismo y corrupción. Sin embargo, ambos liderazgos rompieron con las tradicionales hegemonías políticas y económicas, ganándose su resistencia y acción conspirativa. ¿Hay diferencia entre la acción de la Sociedad Rural Argentina, la FEDECAMARAS venezolana, con la articulación mediática de EL Clarín y La Nación; o el accionar de El Nacional? La respuesta es no. Tienen como conector común el papel de intermediador que juegan en el sistema-mundo y los intereses que ellos representan a lo interior de la estructura económica-social en Argentina y Venezuela. Por ello, el común denominador de la Sociedad Rural, de FEDECAMARAS, de los diarios La nación, El Clarín y El Nacional, es su resistencia a una mejor distribución de la riqueza.
En segundo lugar, ambos liderazgos de Kichner y Chávez, trajeron a la política – al debate político- la necesidad de distribuir la riqueza y generar políticas de equilibrio social. Ello se traduce, que hay menos excedentes de apropiación por parte de las elites propietarias. Las políticas sociales de Kichner y Chávez, generaron un mejor coeficiente de Gini, es decir, menos desequilibrios en la distribución de las riquezas en Argentina y Venezuela. La reacción de las derechas propietarias en ambos casos, fue la misma: decir que se socializaba la pobreza y que el Estado daba dádivas a costa de los que más tienen.
Tercero, Kichner y Chávez pulverizaron los liderazgos tradicionales de los partidos históricos pero al hacerlo, por dialéctica, "impulsaron" liderazgos empresariales de nuevo tipo, que hoy tienen asediado la posibilidad de continuar el proceso de transición. En el caso de Argentina, Mauricio Macri, empresario ligado a grupos de poder y en Venezuela, Henrique Capriles Radonsky, aunque esté último con competición en el caso del más radical de derecha, Leopoldo López.
Esa democracia popular o radical, ha generado presiones externas, que responden a los intereses de los imperialismos colectivos en Argentina y Venezuela. La economía argentina, poderosa industrialmente, ha sido acosada por los capitales buitres, que tienen parte de su deuda externa y la presionan de maneras diversas. En el caso de Venezuela, está asociado al petróleo y el papel geopolítico del país en el Continente. Esos actores externos se asocian con los elementos de la nueva derecha. No es casual que la estrategia política de Macri, tenga coincidencia con la estrategia electoral de Capriles en octubre de 2012. Eso es, disolver su identificación directa con el discurso liberal y presentarse como un moderado.
Macri y Capriles, han edulcorado su discurso, hablan de lo "popular", hablan de apertura a todos los sectores pero en el fondo, representan los intereses de los imperialismos colectivos. La apropiación de los elementos esenciales del discurso de izquierda es característica en ambos. Por otra parte, observamos la aplicación de una estrategia de transposición, eso es asignar las responsabilidades al adversario. Macri y Capriles, representantes del liberalismo y del ajuste privatizador, le asignan la culpa de la crisis económica heredada a los líderes Kichner y Chávez. Nunca dicen que ha sido el liberalismo y sus prácticas las que condujeron a la pobreza y la exclusión en ambos países. Lo más peligroso, es que el avance de la nueva derecha, es una co-responsabilidad de estos liderazgos sucesores, en el sentido que muchas veces se asumen posiciones dogmáticas, que renuncian a profundizar la transformación iniciada y resolver los errores que se cometen, son ampliados – a través de operaciones psicológicas- por las redes mediáticas.
El grupo Clarín y El Nacional, mantienen un constante bombardeo comunicativo contra los gobiernos de Cristina Kichner y Nicolás Maduro, ampliando, magnificando, amplificando los errores, los casos de corrupción (que sin duda hay), pero peor aún, impulsando el descontento, el miedo, la frustración y la desesperanza, creando confusión e incentivando un "voto castigo", presentando a esta Nueva derecha, como una opción "liberadora". Detrás de todo esto, hay una intervención velada, pues está claro para los imperialismos colectivos la urgencia de desmontar, en términos geopolíticos la tríada ABV (Argentina, Brasil y Venezuela).
El resultado en Argentina, muestra el enjundioso esfuerzo, por desmontar estas democracias populares y producir un retroceso (la estrategia rollerback de Obama) a situaciones previas, donde haya Gobiernos accesibles y complacientes en términos de control de recursos naturales. La enseñanza para las próximas elecciones en Venezuela, es para el PSUV y el Polo Patriótico, en lo que respecta a las estrategias de comunicación política y cómo estas buscan confundir al electorado clave (los sectores populares). La arremetida imperial es clara. ¿Qué hacemos? Contemplamos o actuamos¡¡
Aporrea
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¿Qué caracteriza estas democracias populares y radicales? En primer lugar, una ruptura con las tradicionales élites políticas que hegemonizaron los respectivos sistemas electorales. En el caso de Argentina, el peronismo da para todo. Hay peronistas de derecha (suena un exabrupto, pero hay que recordar al ex presidente Menem), peronistas de izquierdas, en fin, una variedad ideológica. En el chavismo, hay sin duda una derecha endógena, que atenta contra la propia construcción del socialismo a través de su burocratismo, clientelismo y corrupción. Sin embargo, ambos liderazgos rompieron con las tradicionales hegemonías políticas y económicas, ganándose su resistencia y acción conspirativa. ¿Hay diferencia entre la acción de la Sociedad Rural Argentina, la FEDECAMARAS venezolana, con la articulación mediática de EL Clarín y La Nación; o el accionar de El Nacional? La respuesta es no. Tienen como conector común el papel de intermediador que juegan en el sistema-mundo y los intereses que ellos representan a lo interior de la estructura económica-social en Argentina y Venezuela. Por ello, el común denominador de la Sociedad Rural, de FEDECAMARAS, de los diarios La nación, El Clarín y El Nacional, es su resistencia a una mejor distribución de la riqueza.
En segundo lugar, ambos liderazgos de Kichner y Chávez, trajeron a la política – al debate político- la necesidad de distribuir la riqueza y generar políticas de equilibrio social. Ello se traduce, que hay menos excedentes de apropiación por parte de las elites propietarias. Las políticas sociales de Kichner y Chávez, generaron un mejor coeficiente de Gini, es decir, menos desequilibrios en la distribución de las riquezas en Argentina y Venezuela. La reacción de las derechas propietarias en ambos casos, fue la misma: decir que se socializaba la pobreza y que el Estado daba dádivas a costa de los que más tienen.
Tercero, Kichner y Chávez pulverizaron los liderazgos tradicionales de los partidos históricos pero al hacerlo, por dialéctica, "impulsaron" liderazgos empresariales de nuevo tipo, que hoy tienen asediado la posibilidad de continuar el proceso de transición. En el caso de Argentina, Mauricio Macri, empresario ligado a grupos de poder y en Venezuela, Henrique Capriles Radonsky, aunque esté último con competición en el caso del más radical de derecha, Leopoldo López.
Esa democracia popular o radical, ha generado presiones externas, que responden a los intereses de los imperialismos colectivos en Argentina y Venezuela. La economía argentina, poderosa industrialmente, ha sido acosada por los capitales buitres, que tienen parte de su deuda externa y la presionan de maneras diversas. En el caso de Venezuela, está asociado al petróleo y el papel geopolítico del país en el Continente. Esos actores externos se asocian con los elementos de la nueva derecha. No es casual que la estrategia política de Macri, tenga coincidencia con la estrategia electoral de Capriles en octubre de 2012. Eso es, disolver su identificación directa con el discurso liberal y presentarse como un moderado.
Macri y Capriles, han edulcorado su discurso, hablan de lo "popular", hablan de apertura a todos los sectores pero en el fondo, representan los intereses de los imperialismos colectivos. La apropiación de los elementos esenciales del discurso de izquierda es característica en ambos. Por otra parte, observamos la aplicación de una estrategia de transposición, eso es asignar las responsabilidades al adversario. Macri y Capriles, representantes del liberalismo y del ajuste privatizador, le asignan la culpa de la crisis económica heredada a los líderes Kichner y Chávez. Nunca dicen que ha sido el liberalismo y sus prácticas las que condujeron a la pobreza y la exclusión en ambos países. Lo más peligroso, es que el avance de la nueva derecha, es una co-responsabilidad de estos liderazgos sucesores, en el sentido que muchas veces se asumen posiciones dogmáticas, que renuncian a profundizar la transformación iniciada y resolver los errores que se cometen, son ampliados – a través de operaciones psicológicas- por las redes mediáticas.
El grupo Clarín y El Nacional, mantienen un constante bombardeo comunicativo contra los gobiernos de Cristina Kichner y Nicolás Maduro, ampliando, magnificando, amplificando los errores, los casos de corrupción (que sin duda hay), pero peor aún, impulsando el descontento, el miedo, la frustración y la desesperanza, creando confusión e incentivando un "voto castigo", presentando a esta Nueva derecha, como una opción "liberadora". Detrás de todo esto, hay una intervención velada, pues está claro para los imperialismos colectivos la urgencia de desmontar, en términos geopolíticos la tríada ABV (Argentina, Brasil y Venezuela).
El resultado en Argentina, muestra el enjundioso esfuerzo, por desmontar estas democracias populares y producir un retroceso (la estrategia rollerback de Obama) a situaciones previas, donde haya Gobiernos accesibles y complacientes en términos de control de recursos naturales. La enseñanza para las próximas elecciones en Venezuela, es para el PSUV y el Polo Patriótico, en lo que respecta a las estrategias de comunicación política y cómo estas buscan confundir al electorado clave (los sectores populares). La arremetida imperial es clara. ¿Qué hacemos? Contemplamos o actuamos¡¡
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martes, 27 de octubre de 2015
Susana Martínez: Está permitido criticar, pero no dudar
Nos las pasamos, horas, días enteros criticando en la calle… aquí o allá. Para luego llegar a la tranquilidad de nuestro hogar a descargar la ira en 140 caracteres, que cada día es insuficiente. ¿Qué estamos molestos? ¿Que no conseguimos tal o cual producto? ¿Qué ya no aguantamos las colas? ¿Qué estamos impotente? Todo pero todo, es cierto. Es verdad, existe un malestar colectivo, cuyos factores son muchos, como muchos los errores que se comenten para solucionarlos.
Mientras tanto, se aproximan unas elecciones, que quizás los opositores utilizaran otra vez como plebiscito. En cierto modo pudiera ser, pues las mismas revisten una importancia que no habría que menospreciar. No tardarás en escuchar a alguien: vota por mí, bla,bla… todas aquellas apasionadas promesas que nuestros oídos refinados escucharan. Irán por ti, a buscar el voto: te pasaran suavemente la mano sobre tus hombres, si tienes suerte te zamparán un beso y si eres faramallero te dirán: un selfie pal Facebook.
Esta campaña electoral viene con todo. Por un lado, el gobierno deberá de una vez por todas, buscar soluciones, para así lograr que el descontento no se convierta en derrota, Por otro lado, la oposición con ingeniosos asesores al estilo de J.J. Rendón nos dibujará una esperanza al son de “hay un camino”. No nos extrañemos, si a Ramos Allup nos tortura con aquella frase: “Con AD se vive mejor”. Quizás, Julio Borges, nos deslumbrará con aquella cuña que ahoga nuestras penas o una María Corina nuevamente vestida de Pocahonta. La oposición no escatimará esfuerzo para poner la cómica. Pues, estamos acostumbrados.
En fin, la situación no es nada fácil. Ojalá no terminemos en decir al estilo de Cantinflas: “No sospecho de nadie, pero desconfío de todos”. Por tal motivo, nuestras críticas son válidas, pero dudar jamás.
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Mientras tanto, se aproximan unas elecciones, que quizás los opositores utilizaran otra vez como plebiscito. En cierto modo pudiera ser, pues las mismas revisten una importancia que no habría que menospreciar. No tardarás en escuchar a alguien: vota por mí, bla,bla… todas aquellas apasionadas promesas que nuestros oídos refinados escucharan. Irán por ti, a buscar el voto: te pasaran suavemente la mano sobre tus hombres, si tienes suerte te zamparán un beso y si eres faramallero te dirán: un selfie pal Facebook.
Esta campaña electoral viene con todo. Por un lado, el gobierno deberá de una vez por todas, buscar soluciones, para así lograr que el descontento no se convierta en derrota, Por otro lado, la oposición con ingeniosos asesores al estilo de J.J. Rendón nos dibujará una esperanza al son de “hay un camino”. No nos extrañemos, si a Ramos Allup nos tortura con aquella frase: “Con AD se vive mejor”. Quizás, Julio Borges, nos deslumbrará con aquella cuña que ahoga nuestras penas o una María Corina nuevamente vestida de Pocahonta. La oposición no escatimará esfuerzo para poner la cómica. Pues, estamos acostumbrados.
En fin, la situación no es nada fácil. Ojalá no terminemos en decir al estilo de Cantinflas: “No sospecho de nadie, pero desconfío de todos”. Por tal motivo, nuestras críticas son válidas, pero dudar jamás.
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miércoles, 21 de octubre de 2015
Bernardo Kliksberg: Las desigualdades abrumadoras
La desigualdad no es un destino ineluctable. Depende de lo que las sociedades hace
El informe fue publicado hace pocos días, y la noticia se hizo viral. El Credit Suisse Bank lanzó su reporte 2015, sobre las tendencias mundiales en materia de riqueza. Señala que hay en el mundo 120.000 personas que tienen más de 50 millones de dólares cada una. Constituyen el 0,7% de la población mundial y son poseedores del 45% de la riqueza global. Su participación en esa riqueza viene aumentando desde el 2008. Cuando se toma el 1% más rico del planeta, tenía en junio 2015, el 50,4% de la riqueza mundial. Es decir, el 1%, tiene hoy más que el 99% de los habitantes del mundo. Dice el informe que es el mayor nivel de desigualdad del último siglo.
Cuando se va un poco más allá, y se toma el 5% más rico, tiene el 76,6% del producto bruto mundial. Y si se busca el 10% más rico es poseedor del 87,7% de todos los activos. O sea queda para el 90% de la población del mundo solo el 12,3%.
Esta concentración del ingreso, hace que quede muy poco espacio para un dinámico actor de la economía, las clases medias. Solo son el 13,9% de la población mundial.
Las polarizaciones son como dice otro informe sobre el tema, de la prestigiosa ONG, Oxfam Internacional, "abrumadoras". 3.400 millones de personas adultas, no tienen más que 10.000 dólares o menos cada una. Las 86 personas más ricas tienen más que todos ellos.
En América Latina, son aún más agudas. La clase media conforma según el Credit Suisse Bank solo el 10% de la población adulta, menos que el promedio mundial. En Perú es solo el 10,3%, en México el 13%.
La región ha hecho progresos pero sigue teniendo el peor coeficiente Gini de todas las regiones.
¿Qué tiene de malo que la desigualdad aumente? Todo. Más desigualdad en un país, significa más pobreza, menos demanda interna, menos capacidad de ahorro nacional, alta deserción escolar, debilitamiento de la cohesión social, más violencia, hasta incide en aumentar la tasa de divorcios, afecta la salud de las personas, y erosiona la confianza y otras dimensiones del capital social.
Los países con menor desigualdad del mundo, Noruega, Suecia, Dinamarca, y Finlandia, son los que hoy encabezan los principales rankings de naciones. Es donde la gente vive más años, no hay corrupción, tienen las tasas más bajas de criminalidad, lideran la tabla de desarrollo humano, tienen bajo desempleo y muy alta productividad.
Su secreto, fue la existencia de grandes pactos nacionales entre las políticas públicas, empresas con responsabilidad social, sindicatos, una sociedad civil movilizada, para alcanzar altos niveles de igualdad. Ello se implementó entre otros aspectos a través de educación de calidad para todos. Sus jóvenes están becados por toda la sociedad para cursar desde el preescolar hasta un postgrado. Asimismo, en protección la salud garantizada para cada uno, y en bajas distancias entre los ejecutivos, y los operarios. Una mujer que da a luz en Noruega, tiene 15 meses de licencia paga, y el cónyuge masculino tres meses. Suecia es el país líder del mundo en igualdad de género. Finlandia encabeza las tablas que miden la calidad de la educación.
La desigualdad no es un destino ineluctable. Depende de lo que las sociedades hacen.
El Papa Francisco ha advertido continuamente sobre el crecimiento de las desigualdades. Ha señalado: "Los derechos humanos se violan no solo por el terrorismo, la represión, los asesinatos, sino también por la existencia de condiciones de extrema pobreza, y estructuras económicas injustas que originan las grandes desigualdades".
La más reciente obra del autor "La responsabilidad social en acción". Puede ampliarse en YouTube, en su serie de TV "El informe Kliksberg" nominada al Emmy.
Kliksberg@aol.com / ElUniversal
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El informe fue publicado hace pocos días, y la noticia se hizo viral. El Credit Suisse Bank lanzó su reporte 2015, sobre las tendencias mundiales en materia de riqueza. Señala que hay en el mundo 120.000 personas que tienen más de 50 millones de dólares cada una. Constituyen el 0,7% de la población mundial y son poseedores del 45% de la riqueza global. Su participación en esa riqueza viene aumentando desde el 2008. Cuando se toma el 1% más rico del planeta, tenía en junio 2015, el 50,4% de la riqueza mundial. Es decir, el 1%, tiene hoy más que el 99% de los habitantes del mundo. Dice el informe que es el mayor nivel de desigualdad del último siglo.
Cuando se va un poco más allá, y se toma el 5% más rico, tiene el 76,6% del producto bruto mundial. Y si se busca el 10% más rico es poseedor del 87,7% de todos los activos. O sea queda para el 90% de la población del mundo solo el 12,3%.
Esta concentración del ingreso, hace que quede muy poco espacio para un dinámico actor de la economía, las clases medias. Solo son el 13,9% de la población mundial.
Las polarizaciones son como dice otro informe sobre el tema, de la prestigiosa ONG, Oxfam Internacional, "abrumadoras". 3.400 millones de personas adultas, no tienen más que 10.000 dólares o menos cada una. Las 86 personas más ricas tienen más que todos ellos.
En América Latina, son aún más agudas. La clase media conforma según el Credit Suisse Bank solo el 10% de la población adulta, menos que el promedio mundial. En Perú es solo el 10,3%, en México el 13%.
La región ha hecho progresos pero sigue teniendo el peor coeficiente Gini de todas las regiones.
¿Qué tiene de malo que la desigualdad aumente? Todo. Más desigualdad en un país, significa más pobreza, menos demanda interna, menos capacidad de ahorro nacional, alta deserción escolar, debilitamiento de la cohesión social, más violencia, hasta incide en aumentar la tasa de divorcios, afecta la salud de las personas, y erosiona la confianza y otras dimensiones del capital social.
Los países con menor desigualdad del mundo, Noruega, Suecia, Dinamarca, y Finlandia, son los que hoy encabezan los principales rankings de naciones. Es donde la gente vive más años, no hay corrupción, tienen las tasas más bajas de criminalidad, lideran la tabla de desarrollo humano, tienen bajo desempleo y muy alta productividad.
Su secreto, fue la existencia de grandes pactos nacionales entre las políticas públicas, empresas con responsabilidad social, sindicatos, una sociedad civil movilizada, para alcanzar altos niveles de igualdad. Ello se implementó entre otros aspectos a través de educación de calidad para todos. Sus jóvenes están becados por toda la sociedad para cursar desde el preescolar hasta un postgrado. Asimismo, en protección la salud garantizada para cada uno, y en bajas distancias entre los ejecutivos, y los operarios. Una mujer que da a luz en Noruega, tiene 15 meses de licencia paga, y el cónyuge masculino tres meses. Suecia es el país líder del mundo en igualdad de género. Finlandia encabeza las tablas que miden la calidad de la educación.
La desigualdad no es un destino ineluctable. Depende de lo que las sociedades hacen.
El Papa Francisco ha advertido continuamente sobre el crecimiento de las desigualdades. Ha señalado: "Los derechos humanos se violan no solo por el terrorismo, la represión, los asesinatos, sino también por la existencia de condiciones de extrema pobreza, y estructuras económicas injustas que originan las grandes desigualdades".
La más reciente obra del autor "La responsabilidad social en acción". Puede ampliarse en YouTube, en su serie de TV "El informe Kliksberg" nominada al Emmy.
Kliksberg@aol.com / ElUniversal
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Alfredo Toro Hardy: China y su gran dilema
Pekín enfrenta un inmenso dilema entre empleo e innovación tecnológica
El décimo segundo plan quinquenal chino, aprobado en marzo de 2011 y en vigencia todavía este año, cambió de manera radical las prioridades económicas de ese país. La ruta trazada por éste perdurará en los años venideros. El objetivo central de dicho plan era reorientar el crecimiento económico mediante el énfasis en el consumo privado doméstico. Ello no sólo para darle mayor sustentabilidad a dicho crecimiento, sino para permitir que su población derivase mayores beneficios de éste.
Pero junto a este propósito medular el plan preveía otro conjunto de objetivos. El primero buscaba un movimiento poblacional desde las zonas rurales de bajo rendimiento productivo, hacia núcleos urbanos con mayor disponibilidad de empleo. Dado el bajo nivel educativo de los grupos humanos involucrados eso implicaba, básicamente, su inserción en trabajos fabriles de mano de obra intensiva. El segundo era dirigir mayores recursos financieros hacia aquellos sectores económicos que pudiesen generar mejor calidad de empleo, especialmente en el área de los servicios. El tercero era elevar el nivel de los recursos humanos por vía de la educación y la capacitación técnica. El cuarto era incrementar las destrezas científicas y tecnológicas de la nación por vía de la innovación.
Consumo e innovación
Ocurre, no obstante, que el último de los objetivos citados podría llegar a convertirse en un fuerte obstáculo para la realización de los demás. El énfasis que China está poniendo en la innovación productiva, mediante el acceso en gran escala a la digitalización y a la robótica, estaría en capacidad de impactar negativamente al plan en su conjunto. La acelerada automatización en curso podría no sólo propiciar el declive prematuro del sector manufacturero de mano de obra intensiva, sino dificultar la consolidación de un modelo de servicios. Ello afectaría seriamente la capacidad de empleo y por extensión la posibilidad de que el consumo privado se transforme en motor fundamental del crecimiento del PIB.
China se ha adentrado a pasos agigantados en el área de la robótica. De acuerdo a Martin Ford en 2014 dicho país contaba ya con un 25% de los robots industriales del planeta, lo que en sí mismo significó un aumento del 54% con respecto al año precedente. Para 2017 deberá estar ocupando el primer puesto mundial en capacidad manufacturera sustentada en la robótica ("China's Troubling Robot Revolution", The New York Times, June 10, 2015). En la sola provincia de Guandong el gobierno de ese país planea invertir 154 millardos de dólares en la introducción de robots industriales, aspirándose que para 2020 el 80% de la capacidad fabril de la ciudad de Guangzhou, capital de dicha provincia, esté ya robotizada. Programas similares se adelantan en Jiangsu y en el Delta del Río Perla, otros de los grandes epicentros industriales de ese país ("China: Thousands of unskilled workers at risk from increased automation", Daily News, 17 June, 2015).
El por qué el gobierno chino busca automatizar crecientemente la producción manufacturera del país es explicable. Ello evitaría la migración de sus industrias hacia países asiáticos de mano de obra más barata. Evitaría, alternativamente, que la producción doméstica se mudase hacia las fábricas robotizadas del mundo desarrollado. Prevendría al mismo tiempo contra el envejecimiento de su población laboral a mediado plazo. El problema, sin embargo, es que los robots no consumen. Esto podría atemperarse si China lograse dar el salto de la fase de mano de obra intensiva a la de los servicios intensivos. Es decir, los servicios sustituyendo a las fabricas como grandes creadores de empleos.
Manufacturas y servicios
No obstante también en esta área el gobierno chino persigue la innovación, promoviendo activamente la revolución digital. Cierto, busca a la vez invertir masivamente en educación y en la calificación profesional de sus recursos humanos. Sin embargo, la revolución digital no sólo afecta a los servicios repetitivos y puntuales, sino que se apresta a penetrar con fuerza exponencial en aquellos sectores que requieren de pensamiento analítico y que se sustentan en altos niveles educativos. En otras palabras, un espectro que abarca desde los servicios al detal hasta actividades profesionales de elevada exigencia formativa. Ello plantea un problema serio para un país que ya en 2013 se encontró con que la mitad de sus egresados universitarios recientes no habían conseguido trabajo y donde 43% de los empleados se encuentran sobrecapacitados para las tareas que desempeñan (Martin Ford, ya citado).
Si a la automatización en las manufacturas se le suma la de los servicios el resultado puede ser una supresión mayúscula de empleos. Ello haría inviable la estrategia de transformar a la demanda privada en eje principal del crecimiento económico, a la vez que crearía inmensos problemas sociales.
China enfrenta así un inmenso dilema entre empleo e innovación tecnológica.
altohar@hotmail.com / ElUniversal
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El décimo segundo plan quinquenal chino, aprobado en marzo de 2011 y en vigencia todavía este año, cambió de manera radical las prioridades económicas de ese país. La ruta trazada por éste perdurará en los años venideros. El objetivo central de dicho plan era reorientar el crecimiento económico mediante el énfasis en el consumo privado doméstico. Ello no sólo para darle mayor sustentabilidad a dicho crecimiento, sino para permitir que su población derivase mayores beneficios de éste.
Pero junto a este propósito medular el plan preveía otro conjunto de objetivos. El primero buscaba un movimiento poblacional desde las zonas rurales de bajo rendimiento productivo, hacia núcleos urbanos con mayor disponibilidad de empleo. Dado el bajo nivel educativo de los grupos humanos involucrados eso implicaba, básicamente, su inserción en trabajos fabriles de mano de obra intensiva. El segundo era dirigir mayores recursos financieros hacia aquellos sectores económicos que pudiesen generar mejor calidad de empleo, especialmente en el área de los servicios. El tercero era elevar el nivel de los recursos humanos por vía de la educación y la capacitación técnica. El cuarto era incrementar las destrezas científicas y tecnológicas de la nación por vía de la innovación.
Consumo e innovación
Ocurre, no obstante, que el último de los objetivos citados podría llegar a convertirse en un fuerte obstáculo para la realización de los demás. El énfasis que China está poniendo en la innovación productiva, mediante el acceso en gran escala a la digitalización y a la robótica, estaría en capacidad de impactar negativamente al plan en su conjunto. La acelerada automatización en curso podría no sólo propiciar el declive prematuro del sector manufacturero de mano de obra intensiva, sino dificultar la consolidación de un modelo de servicios. Ello afectaría seriamente la capacidad de empleo y por extensión la posibilidad de que el consumo privado se transforme en motor fundamental del crecimiento del PIB.
China se ha adentrado a pasos agigantados en el área de la robótica. De acuerdo a Martin Ford en 2014 dicho país contaba ya con un 25% de los robots industriales del planeta, lo que en sí mismo significó un aumento del 54% con respecto al año precedente. Para 2017 deberá estar ocupando el primer puesto mundial en capacidad manufacturera sustentada en la robótica ("China's Troubling Robot Revolution", The New York Times, June 10, 2015). En la sola provincia de Guandong el gobierno de ese país planea invertir 154 millardos de dólares en la introducción de robots industriales, aspirándose que para 2020 el 80% de la capacidad fabril de la ciudad de Guangzhou, capital de dicha provincia, esté ya robotizada. Programas similares se adelantan en Jiangsu y en el Delta del Río Perla, otros de los grandes epicentros industriales de ese país ("China: Thousands of unskilled workers at risk from increased automation", Daily News, 17 June, 2015).
El por qué el gobierno chino busca automatizar crecientemente la producción manufacturera del país es explicable. Ello evitaría la migración de sus industrias hacia países asiáticos de mano de obra más barata. Evitaría, alternativamente, que la producción doméstica se mudase hacia las fábricas robotizadas del mundo desarrollado. Prevendría al mismo tiempo contra el envejecimiento de su población laboral a mediado plazo. El problema, sin embargo, es que los robots no consumen. Esto podría atemperarse si China lograse dar el salto de la fase de mano de obra intensiva a la de los servicios intensivos. Es decir, los servicios sustituyendo a las fabricas como grandes creadores de empleos.
Manufacturas y servicios
No obstante también en esta área el gobierno chino persigue la innovación, promoviendo activamente la revolución digital. Cierto, busca a la vez invertir masivamente en educación y en la calificación profesional de sus recursos humanos. Sin embargo, la revolución digital no sólo afecta a los servicios repetitivos y puntuales, sino que se apresta a penetrar con fuerza exponencial en aquellos sectores que requieren de pensamiento analítico y que se sustentan en altos niveles educativos. En otras palabras, un espectro que abarca desde los servicios al detal hasta actividades profesionales de elevada exigencia formativa. Ello plantea un problema serio para un país que ya en 2013 se encontró con que la mitad de sus egresados universitarios recientes no habían conseguido trabajo y donde 43% de los empleados se encuentran sobrecapacitados para las tareas que desempeñan (Martin Ford, ya citado).
Si a la automatización en las manufacturas se le suma la de los servicios el resultado puede ser una supresión mayúscula de empleos. Ello haría inviable la estrategia de transformar a la demanda privada en eje principal del crecimiento económico, a la vez que crearía inmensos problemas sociales.
China enfrenta así un inmenso dilema entre empleo e innovación tecnológica.
altohar@hotmail.com / ElUniversal
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martes, 20 de octubre de 2015
Moisés Naím: ¿Hasta cuándo durará la crisis económica?
¿Cuánto tiempo más tendrá el mundo que sufrir una situación en la cual es difícil encontrar trabajo, los salarios se estancan o caen y los gobiernos se ven forzados a recortar presupuestos, reducir servicios públicos y eliminar programas sociales? Esta es la pregunta que se hacen las millones de personas afectadas por la mala situación económica. De Canadá a Italia, de China a Brasil y de Indonesia a Rusia la pregunta es la misma: ¿hasta cuándo?
La respuesta depende, por supuesto, del diagnóstico que se tenga sobre sus causas. Hay cuatro interpretaciones principales acerca de las razones por las cuales la economía global está tan anémica.
La primera es que llegó a su fin el “superciclo de las commodities”. A comienzos de este siglo se produjo un fuerte aumento de los precios de metales, hidrocarburos, productos agrícolas y en general todo tipo de materias primas —las llamadas “commodities”—. Entre el año 2000 y el 2010 su precio promedio se duplicó (en contraste, durante todo el siglo XX el promedio de estos precios cayó en un 0,5% cada año).
El crecimiento de la economía mundial y, sobre todo, el apetito de Asia, especialmente de China, creó una fuerte demanda de estos productos que hizo subir dramáticamente sus precios. Pero desde el año 2011, esta tendencia se revirtió y los precios han caído en un 40%, lo cual ha afectado a las economías de los países exportadores, que vivieron un boom cuando los precios estuvieron altos.
Pero, ¿por qué también lo están pasando mal países como China o las economías de Europa o Japón, todas ellas economías que no dependen de la exportación de commodities?
Una segunda interpretación de las causas de la crisis se centra en China. El gigante asiático ha sido una de las locomotoras principales —y a veces la única— que arrastra a las demás economías del mundo. Durante la crisis económica de 2008, cuando colapsaron las economías europeas y la de Estados Unidos, el Gobierno chino adoptó un muy agresivo programa de expansión económica. Aumentó el gasto público y la liquidez monetaria, amplió el crédito, estimuló las inversiones y tomó todo tipo de medidas que mantuvieron el dinamismo económico del país y su capacidad de apoyar la economía global. Hay un impactante dato que ilustra el alcance de este estímulo económico: Entre 2010 y 2013 en China se vertió más cemento en obras de construcción que todo el cemento usado en Estados Unidos durante todo el siglo anterior.
Pero esta expansión ha demostrado ser insostenible. Y hay síntomas preocupantes con respecto a la salud económica de China. Para los más pesimistas, esta locomotora ha descarrilado. Para otros, simplemente sufre una desaceleración temporal. En cualquier caso, la realidad es que la economía mundial ya no cuenta con China como su comprador de materias primas o como una fuente de financiamiento para el resto del mundo.
La desaceleración china, sin embargo, no explica la anemia económica de Europa y otros países desarrollados. El economista Kenneth Rogoff argumenta que esta debilidad se debe a lo que llama el “fin del superciclo de la deuda”. Según Rogoff, después de un prolongado período en el cual países, empresas y personas se endeudaron demasiado, ahora sufren la inevitable “resaca” en el cual se ven forzados a reducir las altas deudas que habían acumulado. Esta necesidad de dedicar recursos a reducir el endeudamiento obviamente limita las posibilidades de consumo e inversión lo cual, a su vez, afecta negativamente el crecimiento económico. Desde esta perspectiva una vez que se baje el endeudamiento las economías volverán a crecer a un mayor ritmo.
Larry Summers, otro destacado economista, no lo ve así. Reconoce que el alto endeudamiento puede estar inhibiendo el crecimiento económico, pero nada comparado con el “estancamiento secular” que según él representa la más grave amenaza que se cierne sobre la economía mundial. Ésta enfermedad económica se da cuando hay mucho más ahorro que inversión. Las causas de esto son muchas y variadas. Inciden factores demográficos tales como la estructura de edad, la composición y la distribución geográfica de la fuerza laboral en el mundo, la desigualdad, el impacto de las populosas economías asiáticas en los salarios y el empleo sobre el resto del planeta y la constante incorporación de nuevas tecnologías que eliminan puestos de trabajo al tiempo que aumentan la capacidad de producción
¿Qué hacer frente a esto? Summers recomienda estimular al máximo las economías y utilizar todos los instrumentos de los cuales disponen los gobiernos para contrarrestar las fuerzas que nutren ese estancamiento.
¿Cuál de estas visiones es la correcta? Todas. No son excluyentes y es obvio que todas presentan un aspecto válido de la realidad económica del mundo. Todas implican que, lamentablemente, la crisis no está cerca de acabarse, aunque en algunos países ya pueda haber señales de recuperación.
Pero quizás el mensaje central de estos diagnósticos es que ahora los gobiernos pagarán más caro y más rápidamente sus errores en materia económica.
La improvisación, el populismo y la búsqueda de atajos ilusorios prolongarán la crisis.
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La respuesta depende, por supuesto, del diagnóstico que se tenga sobre sus causas. Hay cuatro interpretaciones principales acerca de las razones por las cuales la economía global está tan anémica.
La primera es que llegó a su fin el “superciclo de las commodities”. A comienzos de este siglo se produjo un fuerte aumento de los precios de metales, hidrocarburos, productos agrícolas y en general todo tipo de materias primas —las llamadas “commodities”—. Entre el año 2000 y el 2010 su precio promedio se duplicó (en contraste, durante todo el siglo XX el promedio de estos precios cayó en un 0,5% cada año).
El crecimiento de la economía mundial y, sobre todo, el apetito de Asia, especialmente de China, creó una fuerte demanda de estos productos que hizo subir dramáticamente sus precios. Pero desde el año 2011, esta tendencia se revirtió y los precios han caído en un 40%, lo cual ha afectado a las economías de los países exportadores, que vivieron un boom cuando los precios estuvieron altos.
Pero, ¿por qué también lo están pasando mal países como China o las economías de Europa o Japón, todas ellas economías que no dependen de la exportación de commodities?
Una segunda interpretación de las causas de la crisis se centra en China. El gigante asiático ha sido una de las locomotoras principales —y a veces la única— que arrastra a las demás economías del mundo. Durante la crisis económica de 2008, cuando colapsaron las economías europeas y la de Estados Unidos, el Gobierno chino adoptó un muy agresivo programa de expansión económica. Aumentó el gasto público y la liquidez monetaria, amplió el crédito, estimuló las inversiones y tomó todo tipo de medidas que mantuvieron el dinamismo económico del país y su capacidad de apoyar la economía global. Hay un impactante dato que ilustra el alcance de este estímulo económico: Entre 2010 y 2013 en China se vertió más cemento en obras de construcción que todo el cemento usado en Estados Unidos durante todo el siglo anterior.
Pero esta expansión ha demostrado ser insostenible. Y hay síntomas preocupantes con respecto a la salud económica de China. Para los más pesimistas, esta locomotora ha descarrilado. Para otros, simplemente sufre una desaceleración temporal. En cualquier caso, la realidad es que la economía mundial ya no cuenta con China como su comprador de materias primas o como una fuente de financiamiento para el resto del mundo.
La desaceleración china, sin embargo, no explica la anemia económica de Europa y otros países desarrollados. El economista Kenneth Rogoff argumenta que esta debilidad se debe a lo que llama el “fin del superciclo de la deuda”. Según Rogoff, después de un prolongado período en el cual países, empresas y personas se endeudaron demasiado, ahora sufren la inevitable “resaca” en el cual se ven forzados a reducir las altas deudas que habían acumulado. Esta necesidad de dedicar recursos a reducir el endeudamiento obviamente limita las posibilidades de consumo e inversión lo cual, a su vez, afecta negativamente el crecimiento económico. Desde esta perspectiva una vez que se baje el endeudamiento las economías volverán a crecer a un mayor ritmo.
Larry Summers, otro destacado economista, no lo ve así. Reconoce que el alto endeudamiento puede estar inhibiendo el crecimiento económico, pero nada comparado con el “estancamiento secular” que según él representa la más grave amenaza que se cierne sobre la economía mundial. Ésta enfermedad económica se da cuando hay mucho más ahorro que inversión. Las causas de esto son muchas y variadas. Inciden factores demográficos tales como la estructura de edad, la composición y la distribución geográfica de la fuerza laboral en el mundo, la desigualdad, el impacto de las populosas economías asiáticas en los salarios y el empleo sobre el resto del planeta y la constante incorporación de nuevas tecnologías que eliminan puestos de trabajo al tiempo que aumentan la capacidad de producción
¿Qué hacer frente a esto? Summers recomienda estimular al máximo las economías y utilizar todos los instrumentos de los cuales disponen los gobiernos para contrarrestar las fuerzas que nutren ese estancamiento.
¿Cuál de estas visiones es la correcta? Todas. No son excluyentes y es obvio que todas presentan un aspecto válido de la realidad económica del mundo. Todas implican que, lamentablemente, la crisis no está cerca de acabarse, aunque en algunos países ya pueda haber señales de recuperación.
Pero quizás el mensaje central de estos diagnósticos es que ahora los gobiernos pagarán más caro y más rápidamente sus errores en materia económica.
La improvisación, el populismo y la búsqueda de atajos ilusorios prolongarán la crisis.
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Chile. La novedad editorial anticapitalista: ‘América Latina: Emancipaciones en construcción’
“Emancipación (del latín emancipatio, -onis): Acción de liberarse de un vínculo, de una traba, de un estado de dependencia, de una dominación, de un prejuicio”
Por Andrés Figueroa Cornejo
‘América Latina: Emancipaciones en construcción’ es un libro recopilatorio editado recientemente por el Doctor en Ciencia Política Franck Gaudichaud (http://www.rebelion.org/autores.php?id=59), y traducido por Rocío Gajardo, con el apoyo incondicional de Darío G.G. Para su publicación en Chile se reunieron dos editoriales independientes, Tiempo Robado (https://tiemporobadoeditoras.wordpress.com/) y América en Movimiento (http://americaenmovimiento.cl/).
El texto está fabricado de muchos textos de poderosa profundidad analítica (una verdadera novedad en el pobre panorama editorial chileno, salvo excepciones contadas, como la Plataforma Nexos (http://www.plataforma-nexos.cl/), la Editorial Quimantú (http://www.quimantu.cl/), la Librería Proyección (http://www.libreriaproyeccion.cl/), Librería Crisis de Valparaíso (https://libreriacrisis.wordpress.com/), Lom Ediciones (http://www.lom.cl/), Le Monde diplomatique-Chile (http://www.lemondediplomatique.cl/), El Desconcierto (http://eldesconcierto.cl/publicaciones/), entre otras pocas).
El mosaico analítico recorre manifestaciones de resistencias anticapitalistas significativas de los pueblos latinoamericanos de Chile, México, Bolivia, Venezuela, Brasil, Ecuador, Colombia, Argentina y Uruguay. Sus claves son liberadoras, lúcidas, amplias, dinámicas, en despliegue y se fundan sobre el análisis concreto de la realidad concreta de cada una de las experiencias registradas críticamente.
Para conocer sus determinaciones principales, el periodista se entrevistó con el editor del libro, Franck Gaudichaud, y uno de los representantes de Tiempo Robado Editores, Ignacio Ponce.
-¿Cuál es el objetivo de la publicación?
(Franck Gaudichaud) “El libro busca reunir varias luchas ejemplares de distintos países de la región, como comunidades indígenas, campesinas, obreras, mujeres en lucha, feministas, etcétera, que nos permitan sacar algunas lecciones de caminos emancipatorios y de sus problemas. El texto refleja experiencias marcadas por la autogestión, la ruptura con el neoliberalismo, el patriarcalismo y el imperio.”
-¿Y desde tu perspectiva, Ignacio?
(Ignacio Ponce) “La edición realizada por Franck logra rescatar esas luchas cotidianas y por abajo de Latinoamérica en sus diversos pueblos. Lo relevante para el caso de Chile, es que hoy también se están dando distintas luchas en distintos lugares, aquí mismo. También el libro permite conocer luchas similares y distintas a lo largo del continente, y comprender que en otros países se viven conflictos y tensiones, al igual que en Chile, incluso en aquellos donde se transitan procesos progresistas. El texto nos enseña que si en Chile llega a existir algún gobierno de carácter ‘de izquierda’, ello no significará para nada el fin de los conflictos. Tal como se vivió durante el gobierno de la Unidad Popular.”
-¿Qué conflicto revelan los textos escogidos?
(FG) “Estamos en medio de un debate actual donde encontramos por un lado, a Emir Sader, Atilio Borón; y por otro costado, a Alberto Acosta, Maristella Svampa, Raúl Sibechi. Allí se discute si nos encontramos en una inflexión, un reflujo, un agotamiento, una nueva etapa, según las posiciones, de lo que en algún tiempo se denominó ‘giro a la izquierda’ o ‘reorientación nacional-progresista’ de varios gobiernos de América Latina. Ahora bien, más allá de que estemos frente a un nuevo ciclo o no, lo que se ve realmente es que se agudizan las tensiones entre los movimientos populares y los gobiernos. El caso tal vez más claro, es lo que ocurre en Ecuador (sectores de pueblos indígenas en lucha contra las políticas extractivistas del Ejecutivo). Al mismo tiempo, se están reactivando las luchas populares en toda la región, independientemente de los gobiernos, contra el extractivismo. Batallas campesinas o urbanas. Son las luchas que enfrentan la depredación extractivista provocadas por el capital transnacional, apoyado por los gobiernos. Al respecto, aún existe una visión muy desarrollista. Aunque, por cierto, el debate no es, al decir del vicepresidente de Bolivia, García Linera, ‘nos quieren condenar a congelar la naturaleza y a seguir siendo pobres’. No, por supuesto que la discusión no es esa. Hay que explotar las riquezas y la naturaleza, pero el problema es si la explotación se da o no en condiciones post-extractivista. Allí las resistencias de las comunidades y pueblos indígenas son fundamentales. Asimismo, en Chile, en los casos de Freirina (http://www.rebelion.org/noticia.php?id=163123) y el pueblo Mapuche (http://www.mapuexpress.org/), entre otros.”
Poder y lucha de clases
-Ahora, más allá del extractivismo como una de las expresiones mundiales del capital por ralentizar la tendencia a la caída de la tasa media de la ganancia, y en su movimiento caracterizado por la incesante acumulación originaria, ¿qué pasa con el tema crucial del poder?
(FG) “El libro también es un campo de debate fraternal entre las distintas estrategias de las izquierdas latinoamericanas en las últimas dos décadas. Para resumir de manera caricaturesca el estado de la discusión, se encuentran desde la toma del poder para que lo asuma la sociedad, hasta que todo el mundo se toma el poder. El libro prueba que estas visiones corresponden a una antinomia absurda, y se aboca más bien a cómo se pueden articular estas tensiones en perspectivas de tomar el poder para cambiarlo sin ser atrapado por él. Al respecto, hay experiencias muy variadas que describe el libro. Por ejemplo, manifestaciones de la ecología radical en Colombia donde existe poder real, construido desde lo territorial, pero que continúa siendo incapaz de hacerse de las fuerzas suficientes a nivel nacional. A la vez, están los consejos comunales en Venezuela y que se inscriben en la política pública estatal, pero que a veces sufren el peso de la burocracia de un Estado que sigue siendo rentista. En general, partimos de la idea de que si tenemos la voluntad de rearmar a la izquierda, debemos abandonar definitivamente el sectarismo, pero sin caer en un electoralismo oportunista.”
-¿Cómo se observa a la institucionalización de las luchas en el texto?
(IP) “En ese sentido, el libro muestra que se trata de proyectos en disputa. Queda claro que, a diferencia de cómo se pensó en el siglo XX, hoy nadie tiene la ‘llave maestra’ para establecer un proyecto post-capitalista. La resolución de si la ‘vía electoral’ o la construcción ‘por abajo’ son la solución, se encuentra en tránsito. Creo que ese combate se aclarará de acuerdo a la cohesión de fuerzas de cada pueblo. Los caminos por recorrer serán necesariamente distintos en cada país.”
-¿De qué manera se expresa en términos ampliados la lucha de clases en las experiencias analizadas en ‘América Latina: Emancipaciones en construcción’?
(FG) “Los diferentes autores provienen de corrientes distintas. Hay libertarios, marxistas clásicos, gente del pensamiento bolivariano, etcétera. Ello da cuenta de un sujeto plural, sin que se disuelva la contradicción capital / fuerza de trabajo, para nada. Sin embargo, se ve que esa contradicción fundamental puede expresarse a través de diferentes actores. El libro deja claro que la discusión de ‘el sujeto’ se encuentra obsoleta, pero no así el de ‘los sujetos’, que es fundamental. La cuestión es cómo construimos sujetos de emancipación, colectivos, populares, que cuenten con un horizonte post-capitalista. El libro no da una respuesta ni un recetario de cómo superar el capitalismo, sino que registra analíticamente experiencias concretas, ‘utopías concretas’ que sí pueden participar en el debate actual.”
-¿Sobrevive el socialismo anticapitalista en la multiplicidad de artículos que forman el libro?
(IP) “Permea varios de los textos. En muchos casos, el horizonte es el socialismo. Ahora bien, intentar concluir que hoy algunos de los países latinoamericanos ya está viviendo una ‘realidad socialista’, para decirlo de algún modo, el mismo libro coloca en tensión ese asunto. Desde las diversas miradas se cuestionan los niveles de politización, como también los niveles de socialización de los proyectos, tanto ‘desde arriba, como desde abajo’. Yo no estoy bien seguro si en la actualidad es preciso anteponer a la edificación del movimiento popular al socialismo, en tanto ‘perspectiva exclusiva’. Si el socialismo llega a convertirse en el eje rearticulador de la emancipación, entonces el socialismo tendrá que ser resignificado. En verdad, la organización popular es el momento que está ‘a la orden del día’.”
-¿Existe un cuestionamiento en los textos del trabajo asalariado y la propiedad privada, esto es, de las relaciones sociales capitalistas?
(IP) “En aquellas prácticas que se centran en la autogestión y el control obrero.”
(FG) “El libro se arma en torno a la auto-organización, la autogestión, la comunidad y los bienes comunes en contra de ciertas dominaciones.”
* Para la adquisición de ‘América Latina: Emancipaciones en construcción’, basta ponerse en contacto con una de las dos editoriales chilenas responsables de su publicación.
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Por Andrés Figueroa Cornejo
‘América Latina: Emancipaciones en construcción’ es un libro recopilatorio editado recientemente por el Doctor en Ciencia Política Franck Gaudichaud (http://www.rebelion.org/autores.php?id=59), y traducido por Rocío Gajardo, con el apoyo incondicional de Darío G.G. Para su publicación en Chile se reunieron dos editoriales independientes, Tiempo Robado (https://tiemporobadoeditoras.wordpress.com/) y América en Movimiento (http://americaenmovimiento.cl/).
El texto está fabricado de muchos textos de poderosa profundidad analítica (una verdadera novedad en el pobre panorama editorial chileno, salvo excepciones contadas, como la Plataforma Nexos (http://www.plataforma-nexos.cl/), la Editorial Quimantú (http://www.quimantu.cl/), la Librería Proyección (http://www.libreriaproyeccion.cl/), Librería Crisis de Valparaíso (https://libreriacrisis.wordpress.com/), Lom Ediciones (http://www.lom.cl/), Le Monde diplomatique-Chile (http://www.lemondediplomatique.cl/), El Desconcierto (http://eldesconcierto.cl/publicaciones/), entre otras pocas).
El mosaico analítico recorre manifestaciones de resistencias anticapitalistas significativas de los pueblos latinoamericanos de Chile, México, Bolivia, Venezuela, Brasil, Ecuador, Colombia, Argentina y Uruguay. Sus claves son liberadoras, lúcidas, amplias, dinámicas, en despliegue y se fundan sobre el análisis concreto de la realidad concreta de cada una de las experiencias registradas críticamente.
Para conocer sus determinaciones principales, el periodista se entrevistó con el editor del libro, Franck Gaudichaud, y uno de los representantes de Tiempo Robado Editores, Ignacio Ponce.
-¿Cuál es el objetivo de la publicación?
(Franck Gaudichaud) “El libro busca reunir varias luchas ejemplares de distintos países de la región, como comunidades indígenas, campesinas, obreras, mujeres en lucha, feministas, etcétera, que nos permitan sacar algunas lecciones de caminos emancipatorios y de sus problemas. El texto refleja experiencias marcadas por la autogestión, la ruptura con el neoliberalismo, el patriarcalismo y el imperio.”
-¿Y desde tu perspectiva, Ignacio?
(Ignacio Ponce) “La edición realizada por Franck logra rescatar esas luchas cotidianas y por abajo de Latinoamérica en sus diversos pueblos. Lo relevante para el caso de Chile, es que hoy también se están dando distintas luchas en distintos lugares, aquí mismo. También el libro permite conocer luchas similares y distintas a lo largo del continente, y comprender que en otros países se viven conflictos y tensiones, al igual que en Chile, incluso en aquellos donde se transitan procesos progresistas. El texto nos enseña que si en Chile llega a existir algún gobierno de carácter ‘de izquierda’, ello no significará para nada el fin de los conflictos. Tal como se vivió durante el gobierno de la Unidad Popular.”
-¿Qué conflicto revelan los textos escogidos?
(FG) “Estamos en medio de un debate actual donde encontramos por un lado, a Emir Sader, Atilio Borón; y por otro costado, a Alberto Acosta, Maristella Svampa, Raúl Sibechi. Allí se discute si nos encontramos en una inflexión, un reflujo, un agotamiento, una nueva etapa, según las posiciones, de lo que en algún tiempo se denominó ‘giro a la izquierda’ o ‘reorientación nacional-progresista’ de varios gobiernos de América Latina. Ahora bien, más allá de que estemos frente a un nuevo ciclo o no, lo que se ve realmente es que se agudizan las tensiones entre los movimientos populares y los gobiernos. El caso tal vez más claro, es lo que ocurre en Ecuador (sectores de pueblos indígenas en lucha contra las políticas extractivistas del Ejecutivo). Al mismo tiempo, se están reactivando las luchas populares en toda la región, independientemente de los gobiernos, contra el extractivismo. Batallas campesinas o urbanas. Son las luchas que enfrentan la depredación extractivista provocadas por el capital transnacional, apoyado por los gobiernos. Al respecto, aún existe una visión muy desarrollista. Aunque, por cierto, el debate no es, al decir del vicepresidente de Bolivia, García Linera, ‘nos quieren condenar a congelar la naturaleza y a seguir siendo pobres’. No, por supuesto que la discusión no es esa. Hay que explotar las riquezas y la naturaleza, pero el problema es si la explotación se da o no en condiciones post-extractivista. Allí las resistencias de las comunidades y pueblos indígenas son fundamentales. Asimismo, en Chile, en los casos de Freirina (http://www.rebelion.org/noticia.php?id=163123) y el pueblo Mapuche (http://www.mapuexpress.org/), entre otros.”
Poder y lucha de clases
-Ahora, más allá del extractivismo como una de las expresiones mundiales del capital por ralentizar la tendencia a la caída de la tasa media de la ganancia, y en su movimiento caracterizado por la incesante acumulación originaria, ¿qué pasa con el tema crucial del poder?
(FG) “El libro también es un campo de debate fraternal entre las distintas estrategias de las izquierdas latinoamericanas en las últimas dos décadas. Para resumir de manera caricaturesca el estado de la discusión, se encuentran desde la toma del poder para que lo asuma la sociedad, hasta que todo el mundo se toma el poder. El libro prueba que estas visiones corresponden a una antinomia absurda, y se aboca más bien a cómo se pueden articular estas tensiones en perspectivas de tomar el poder para cambiarlo sin ser atrapado por él. Al respecto, hay experiencias muy variadas que describe el libro. Por ejemplo, manifestaciones de la ecología radical en Colombia donde existe poder real, construido desde lo territorial, pero que continúa siendo incapaz de hacerse de las fuerzas suficientes a nivel nacional. A la vez, están los consejos comunales en Venezuela y que se inscriben en la política pública estatal, pero que a veces sufren el peso de la burocracia de un Estado que sigue siendo rentista. En general, partimos de la idea de que si tenemos la voluntad de rearmar a la izquierda, debemos abandonar definitivamente el sectarismo, pero sin caer en un electoralismo oportunista.”
-¿Cómo se observa a la institucionalización de las luchas en el texto?
(IP) “En ese sentido, el libro muestra que se trata de proyectos en disputa. Queda claro que, a diferencia de cómo se pensó en el siglo XX, hoy nadie tiene la ‘llave maestra’ para establecer un proyecto post-capitalista. La resolución de si la ‘vía electoral’ o la construcción ‘por abajo’ son la solución, se encuentra en tránsito. Creo que ese combate se aclarará de acuerdo a la cohesión de fuerzas de cada pueblo. Los caminos por recorrer serán necesariamente distintos en cada país.”
-¿De qué manera se expresa en términos ampliados la lucha de clases en las experiencias analizadas en ‘América Latina: Emancipaciones en construcción’?
(FG) “Los diferentes autores provienen de corrientes distintas. Hay libertarios, marxistas clásicos, gente del pensamiento bolivariano, etcétera. Ello da cuenta de un sujeto plural, sin que se disuelva la contradicción capital / fuerza de trabajo, para nada. Sin embargo, se ve que esa contradicción fundamental puede expresarse a través de diferentes actores. El libro deja claro que la discusión de ‘el sujeto’ se encuentra obsoleta, pero no así el de ‘los sujetos’, que es fundamental. La cuestión es cómo construimos sujetos de emancipación, colectivos, populares, que cuenten con un horizonte post-capitalista. El libro no da una respuesta ni un recetario de cómo superar el capitalismo, sino que registra analíticamente experiencias concretas, ‘utopías concretas’ que sí pueden participar en el debate actual.”
-¿Sobrevive el socialismo anticapitalista en la multiplicidad de artículos que forman el libro?
(IP) “Permea varios de los textos. En muchos casos, el horizonte es el socialismo. Ahora bien, intentar concluir que hoy algunos de los países latinoamericanos ya está viviendo una ‘realidad socialista’, para decirlo de algún modo, el mismo libro coloca en tensión ese asunto. Desde las diversas miradas se cuestionan los niveles de politización, como también los niveles de socialización de los proyectos, tanto ‘desde arriba, como desde abajo’. Yo no estoy bien seguro si en la actualidad es preciso anteponer a la edificación del movimiento popular al socialismo, en tanto ‘perspectiva exclusiva’. Si el socialismo llega a convertirse en el eje rearticulador de la emancipación, entonces el socialismo tendrá que ser resignificado. En verdad, la organización popular es el momento que está ‘a la orden del día’.”
-¿Existe un cuestionamiento en los textos del trabajo asalariado y la propiedad privada, esto es, de las relaciones sociales capitalistas?
(IP) “En aquellas prácticas que se centran en la autogestión y el control obrero.”
(FG) “El libro se arma en torno a la auto-organización, la autogestión, la comunidad y los bienes comunes en contra de ciertas dominaciones.”
* Para la adquisición de ‘América Latina: Emancipaciones en construcción’, basta ponerse en contacto con una de las dos editoriales chilenas responsables de su publicación.
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domingo, 18 de octubre de 2015
Susana Martínez: Estoy en guerra
Salí temprano, muy temprano, en medio de la lluvia. Esas gotas frías eran como un somnífero por las constantes olas de calor, que últimamente nos agobia. Luego como un milagro salió el sol, burlándose de los pronósticos de Inameh. Ese día, como siempre dispuesta a confrontar la calle… esas situaciones que nos asedia continuamente. Estoy en guerra, pensé: en guerra conmigo misma, en guerra con mis demonios, en guerra por la impotencia... en guerra con la misma guerra. A resumidas cuentas estamos sumergidos, en una especie de resistencia urbana, donde los poderosos inconformes, se comen a pedazo la esperanza de los débiles.
En el camino, las enormes colas dibujaban como arco iris la ciudad. La gente peleando contra lo banal y lo cotidiano. Quizás impaciente, por esa mano que no termina de endurecerse, por ese revolcón que no se cristaliza, y por esas 3 R que no se cumplen.
Pudiera estar en paz, y dispararle un misil a mi conciencia. Y ver al mundo a través de los ojos de Lorenzo Mendoza, que por cierto también se siente en combate. SI, ese Lorenzo, (El don PAN), el mismo –claro- , que le otorgan dólares a 6,30, burlándose del pueblo, porque tiene un monopolio de productos de la llamada cesta básica. ¿Pudiera estar en guerra Lorenzo? Aquel su majestad, joven empresario, que el Rrégimen le ha dado la oportunidad de cuadruplicar su fortuna. Ese que recordamos al son de “si se puede”: la madre que amasa la arepa, al niño que juega beisbol y los cuentos de sus microempresarios. Pues bien, esto sólo pasa en un país donde un prófugo se entrega a una dictadura castrochavista en nombre de la libertad.
Es verdad, Lorenzo Mendoza, estamos en guerra, pero nuestra batalla es diferente.
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En el camino, las enormes colas dibujaban como arco iris la ciudad. La gente peleando contra lo banal y lo cotidiano. Quizás impaciente, por esa mano que no termina de endurecerse, por ese revolcón que no se cristaliza, y por esas 3 R que no se cumplen.
Pudiera estar en paz, y dispararle un misil a mi conciencia. Y ver al mundo a través de los ojos de Lorenzo Mendoza, que por cierto también se siente en combate. SI, ese Lorenzo, (El don PAN), el mismo –claro- , que le otorgan dólares a 6,30, burlándose del pueblo, porque tiene un monopolio de productos de la llamada cesta básica. ¿Pudiera estar en guerra Lorenzo? Aquel su majestad, joven empresario, que el Rrégimen le ha dado la oportunidad de cuadruplicar su fortuna. Ese que recordamos al son de “si se puede”: la madre que amasa la arepa, al niño que juega beisbol y los cuentos de sus microempresarios. Pues bien, esto sólo pasa en un país donde un prófugo se entrega a una dictadura castrochavista en nombre de la libertad.
Es verdad, Lorenzo Mendoza, estamos en guerra, pero nuestra batalla es diferente.
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jueves, 15 de octubre de 2015
Oscar Bravo: La oposición se opone al simulacro, porque ellos son el simulacro
Para éste domingo 18 de octubre de 2015, el Consejo Nacional Electoral invita a la población en general (electoras y electores) a participar en un simulacro electoral que va a contribuir verificar y a constatar la confiabilidad de las máquinas de votación, la herradura, la transmisión de los datos y el tiempo de duración.
El hecho es que la derecha y la ultraderecha política venezolana representada en la auto-denominada “La MUD”, ya anunciaron que no van a participar en el simulacro, sin dar argumentos razonables y de peso para no asistir.
Además de que la oposición vive en un laberinto por sus propias contradicciones, en primer lugar, existe una guerra interna entre “los egos” y “liderazgos”, tanto que hasta Manuel rosales se viene a Venezuela a pelear por el puesto de “líder del antichavismo”, y en segundo lugar, la lucha entre los grupos opositores que siguen ganados y apuestan a “la salida” y al “vete ya”, en contra de lo que creen en las salidas electorales, para dar un golpe de Estado parlamentario…pero no descartan los atajos.
Ahora bien, entre las reales razones por la cuales la oposición política Venezolana no quiere participar, están las siguientes: A.- si asisten al simulacro, saben que los resultados le van a ser desfavorable y eso atenta contra “la imagen de ganadores” que ellos quieren venderle al país, hay que recordar que ellos “fabrican” encuestas para decir, que están ganando, para luego cuando pierden, gritar fraude!.. B.-ellos quieren enrarecer el ambiente electoral, para atacar al árbitro y poner en duda la transparencia del sistema electoral venezolano.
Hay que dejar muy claro que ésta nefasta y mediocre oposición son el verdadero simulacro que quieren vender una imagen de demócratas y en realidad son unos fascistas que sólo quieren a como dé lugar arrebatar el poder político, que no pueden lograr por la vía electoral.
Politólogo.
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El hecho es que la derecha y la ultraderecha política venezolana representada en la auto-denominada “La MUD”, ya anunciaron que no van a participar en el simulacro, sin dar argumentos razonables y de peso para no asistir.
Además de que la oposición vive en un laberinto por sus propias contradicciones, en primer lugar, existe una guerra interna entre “los egos” y “liderazgos”, tanto que hasta Manuel rosales se viene a Venezuela a pelear por el puesto de “líder del antichavismo”, y en segundo lugar, la lucha entre los grupos opositores que siguen ganados y apuestan a “la salida” y al “vete ya”, en contra de lo que creen en las salidas electorales, para dar un golpe de Estado parlamentario…pero no descartan los atajos.
Ahora bien, entre las reales razones por la cuales la oposición política Venezolana no quiere participar, están las siguientes: A.- si asisten al simulacro, saben que los resultados le van a ser desfavorable y eso atenta contra “la imagen de ganadores” que ellos quieren venderle al país, hay que recordar que ellos “fabrican” encuestas para decir, que están ganando, para luego cuando pierden, gritar fraude!.. B.-ellos quieren enrarecer el ambiente electoral, para atacar al árbitro y poner en duda la transparencia del sistema electoral venezolano.
Hay que dejar muy claro que ésta nefasta y mediocre oposición son el verdadero simulacro que quieren vender una imagen de demócratas y en realidad son unos fascistas que sólo quieren a como dé lugar arrebatar el poder político, que no pueden lograr por la vía electoral.
Politólogo.
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Manuel E. Yepe: Estados Unidos y la trata de esclavos en Cuba
“En Estados Unidos, muchos museos, monumentos y sitios históricos dedicados a la esclavitud se han convertido en focos de diálogo nacional sobre temas de raza y desigualdad. Cuba debía ser parte de estos intercambios porque la esclavitud cubana y el comercio ilegal de esclavos contribuyeron a la creación de Estados Unidos”.
Tal es la propuesta del historiador Stephen Chambers, autor del libro "No fue Dios sino la ganancia: la historia jamás contada de la esclavitud cubana, la doctrina Monroe y el surgimiento de los Estados Unidos (No God But Gain: The Untold Story of Cuban Slavery, the Monroe Doctrine, and the Making of the United States". (Verso, September 8, 2015).
En la joven república, los líderes estadounidenses, desde Thomas Jefferson hasta John Quincy Adams, velaron tenazmente por proteger la existencia de la esclavitud. Hicieron de ella y del comercio prohibido de esclavos una base para el desarrollo nacional y la expansión. Esto preparó el terreno para un auge en la producción algodonera y décadas de crecimiento económico interdependiente, lo que en última instancia generó un crecimiento fracturado que desencadenaría la Guerra Civil de Estados Unidos.
Según Chambers, ahora que Estados Unidos y Cuba han restablecido sus relaciones diplomáticas y trabajan por la normalización de sus nexos “brilla una luz sobre este legado compartido que puede ayudar a que ambas naciones comienzan otra vez”.
Hoy, 150 años después de finalizada la Guerra Civil en Estados Unidos, muchas de las cicatrices de la esclavitud aún son visibles, especialmente en el sur, “sin olvidar los lazos de Estados Unidos con la esclavitud aun más al sur… en Cuba”. Es hora de reconocer el papel estadounidense en el comercio de esclavos hacia Cuba y el verdadero propósito de la doctrina Monroe.
Fueron más de 300 años de horrores los que la esclavitud y el comercio de esclavos provocaron en Cuba, describe Chambers.
El tiempo de vida promedio desde el momento de su llegada a Cuba de los africanos esclavizados a menudo se calculaba en un solo dígito. Una tasa de mortalidad que por sí sola explica por qué la esclavitud cubana dependía del comercio de esclavos.
Aunque los Estados Unidos e Inglaterra prohibieron el comercio de esclavos en 1808, el 85 por ciento de los esclavos transportados a Cuba (759.669) fueron traídos después de la prohibición de Estados
Unidos. Por entonces, los estadounidenses habían decidido que la esclavitud cubana tenía un sentido económico e intensificaron su participación en el negocio.
Después de su revolución, la joven nación estadounidense quedó endeudada y abocada a una rápida expansión de la frontera del algodón. Pero los mercaderes que manejaban los bancos y compañías de seguros sólo proporcionaban préstamos agrícolas a base de una fuente confiable en especie (oro y plata) y en azúcar y el café para respaldar sus monedas y compensar los déficits comerciales con los centros financieros de Europa.
Si bien el café, el azúcar y las especies abrieron las puertas de los mercados europeos y asiáticos para los inversionistas de EEUU, las naves cargadas de esclavos fueron la clave de sus ingresos.
Esta es la razón por la qué, a pesar de la difusión del sentimiento antiesclavista y el abolicionismo en ambos lados del Atlántico, las numerosas leyes y tratados para frenar el comercio de esclavos y el envío de escuadras navales para patrullar las costas de África y las Américas, el comercio de esclavos no terminó en 1808. De hecho, durante muchos años posteriores se intensificó, y las políticas económicas de libre comercio a menudo coadyuvaban con la expansión de la esclavitud. El desmantelamiento de restricciones al comercio – a menudo enmascarado como golpes contra la emancipación – realmente consolidó la esclavitud en Cuba y en todo el hemisferio.
La política exterior de Estados Unidos protegía la expansión de la esclavitud cubana. La famosa declaración del Presidente James Monroe en 1823 conocida como doctrina Monroe, pretendía prohibir a los europeos acceso al hemisferio y se convirtió en piedra angular en la diplomacia de Washington durante generaciones. En el momento de su formulación, sin embargo, se pretendía impedir la intromisión británica en la trata ilegal de esclavos, respondiendo al interés de muchos estadounidenses en la masiva expansión de la esclavitud en Cuba.
En la década de 1820, Cuba se había convertido en el segundo socio comercial de Estados Unidos y el mayor productor de azúcar del mundo. Los inversores estadounidenses, las autoridades y comerciantes,
incluyendo muchos del norte de Estados Unidos, participaron en todos los aspectos de este desarrollo. Algunos estadounidenses llegaron a ser propietarios y operadores de plantaciones cubanas ellos mismos. Muchos otros estaban vinculados de diversas maneras a negocios basados en la esclavitud en Cuba, asevera Stephen Chambers.
Octubre 10 de 2015.
http://manuelyepe.wordpress.com/
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Tal es la propuesta del historiador Stephen Chambers, autor del libro "No fue Dios sino la ganancia: la historia jamás contada de la esclavitud cubana, la doctrina Monroe y el surgimiento de los Estados Unidos (No God But Gain: The Untold Story of Cuban Slavery, the Monroe Doctrine, and the Making of the United States". (Verso, September 8, 2015).
En la joven república, los líderes estadounidenses, desde Thomas Jefferson hasta John Quincy Adams, velaron tenazmente por proteger la existencia de la esclavitud. Hicieron de ella y del comercio prohibido de esclavos una base para el desarrollo nacional y la expansión. Esto preparó el terreno para un auge en la producción algodonera y décadas de crecimiento económico interdependiente, lo que en última instancia generó un crecimiento fracturado que desencadenaría la Guerra Civil de Estados Unidos.
Según Chambers, ahora que Estados Unidos y Cuba han restablecido sus relaciones diplomáticas y trabajan por la normalización de sus nexos “brilla una luz sobre este legado compartido que puede ayudar a que ambas naciones comienzan otra vez”.
Hoy, 150 años después de finalizada la Guerra Civil en Estados Unidos, muchas de las cicatrices de la esclavitud aún son visibles, especialmente en el sur, “sin olvidar los lazos de Estados Unidos con la esclavitud aun más al sur… en Cuba”. Es hora de reconocer el papel estadounidense en el comercio de esclavos hacia Cuba y el verdadero propósito de la doctrina Monroe.
Fueron más de 300 años de horrores los que la esclavitud y el comercio de esclavos provocaron en Cuba, describe Chambers.
El tiempo de vida promedio desde el momento de su llegada a Cuba de los africanos esclavizados a menudo se calculaba en un solo dígito. Una tasa de mortalidad que por sí sola explica por qué la esclavitud cubana dependía del comercio de esclavos.
Aunque los Estados Unidos e Inglaterra prohibieron el comercio de esclavos en 1808, el 85 por ciento de los esclavos transportados a Cuba (759.669) fueron traídos después de la prohibición de Estados
Unidos. Por entonces, los estadounidenses habían decidido que la esclavitud cubana tenía un sentido económico e intensificaron su participación en el negocio.
Después de su revolución, la joven nación estadounidense quedó endeudada y abocada a una rápida expansión de la frontera del algodón. Pero los mercaderes que manejaban los bancos y compañías de seguros sólo proporcionaban préstamos agrícolas a base de una fuente confiable en especie (oro y plata) y en azúcar y el café para respaldar sus monedas y compensar los déficits comerciales con los centros financieros de Europa.
Si bien el café, el azúcar y las especies abrieron las puertas de los mercados europeos y asiáticos para los inversionistas de EEUU, las naves cargadas de esclavos fueron la clave de sus ingresos.
Esta es la razón por la qué, a pesar de la difusión del sentimiento antiesclavista y el abolicionismo en ambos lados del Atlántico, las numerosas leyes y tratados para frenar el comercio de esclavos y el envío de escuadras navales para patrullar las costas de África y las Américas, el comercio de esclavos no terminó en 1808. De hecho, durante muchos años posteriores se intensificó, y las políticas económicas de libre comercio a menudo coadyuvaban con la expansión de la esclavitud. El desmantelamiento de restricciones al comercio – a menudo enmascarado como golpes contra la emancipación – realmente consolidó la esclavitud en Cuba y en todo el hemisferio.
La política exterior de Estados Unidos protegía la expansión de la esclavitud cubana. La famosa declaración del Presidente James Monroe en 1823 conocida como doctrina Monroe, pretendía prohibir a los europeos acceso al hemisferio y se convirtió en piedra angular en la diplomacia de Washington durante generaciones. En el momento de su formulación, sin embargo, se pretendía impedir la intromisión británica en la trata ilegal de esclavos, respondiendo al interés de muchos estadounidenses en la masiva expansión de la esclavitud en Cuba.
En la década de 1820, Cuba se había convertido en el segundo socio comercial de Estados Unidos y el mayor productor de azúcar del mundo. Los inversores estadounidenses, las autoridades y comerciantes,
incluyendo muchos del norte de Estados Unidos, participaron en todos los aspectos de este desarrollo. Algunos estadounidenses llegaron a ser propietarios y operadores de plantaciones cubanas ellos mismos. Muchos otros estaban vinculados de diversas maneras a negocios basados en la esclavitud en Cuba, asevera Stephen Chambers.
Octubre 10 de 2015.
http://manuelyepe.wordpress.com/
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sábado, 10 de octubre de 2015
Susana Martínez: Metidas de patas
Últimamente las redes sociales han estado encendidas, por metidas de matas realizadas tanto por un lado como por el otro. Más allá de esas equivocaciones reflejadas en burlas o chistes de mal gusto, demuestra que en verdad estamos en presencia de graves metidas de matas, que ha carcomido la sonrisa del venezolano. Por un lado, la oposición ha ejercido sin tapujo por más de 15 años esta práctica, pues quieren llegar al poder, pero a juro. Sin importarles a quien se llevan por delante, con tal de sentarse en la silla de Miraflores; esta ambición desmedida le ha costado la vida a más de una decena de personas. Eso es lo más grave. Muy apartando los chistes de un Capriles o un Rosales, que por cierto, siguen siendo tendencia en las payasadas de la oposición (No creo que los barriles ecológicos los supere). La oposición no juega carrito cuando se trata de desestabilizar al país.
Por otro lado, está el gobierno revolucionario, que lamentablemente no se escapa de eso. (Y digo lamentablemente, porque aún muchos apostamos en él). No nos referimos, a las colas sabrosas ni mucho menos a comer piedrita fritas, la cosa es más seria. Realmente, no estamos para mamadera de gallo. Estamos sumergidos en una especie de desidia colectiva, porque lo vemos a cada rato en organismos públicos que antes funcionaban bien y ahora no. Quizás nos preguntamos, ¿Será difícil corregir los errores para impedir tanto descontento?
Deseamos que Movitnet, Sundde, y tantos otros organismos o empresas del estado, brinden la seguridad y sobretodo la respuesta rápida que tanto anhelamos. No creo estar equivocada, e insisto el problema no es sólo los que echan vaina, sino los que no hacen nada para evitarla. En fin, no estamos en tiempos de burlas cuando alguien se equivoque, lo que queremos es menos equivocaciones.
Pues bien, de algún modo queremos extinguir las metidas de pata, vengan de donde vengan.
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Por otro lado, está el gobierno revolucionario, que lamentablemente no se escapa de eso. (Y digo lamentablemente, porque aún muchos apostamos en él). No nos referimos, a las colas sabrosas ni mucho menos a comer piedrita fritas, la cosa es más seria. Realmente, no estamos para mamadera de gallo. Estamos sumergidos en una especie de desidia colectiva, porque lo vemos a cada rato en organismos públicos que antes funcionaban bien y ahora no. Quizás nos preguntamos, ¿Será difícil corregir los errores para impedir tanto descontento?
Deseamos que Movitnet, Sundde, y tantos otros organismos o empresas del estado, brinden la seguridad y sobretodo la respuesta rápida que tanto anhelamos. No creo estar equivocada, e insisto el problema no es sólo los que echan vaina, sino los que no hacen nada para evitarla. En fin, no estamos en tiempos de burlas cuando alguien se equivoque, lo que queremos es menos equivocaciones.
Pues bien, de algún modo queremos extinguir las metidas de pata, vengan de donde vengan.
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viernes, 9 de octubre de 2015
Marcelo Colussi: 12 de octubre: una herida abierta
"Hemos venido aquí a servir a Dios y al Rey, y también a hacernos ricos" Bernal Díaz del Castillo, Guatemala, siglo XVI
"¿Lograremos exterminar a los indios? Por los salvajes de América siento una invencible repugnancia sin poderlo remediar. Esa canalla no son más que unos indios asquerosos a quienes mandaría colgar ahora si reapareciesen. (…). Se los debe exterminar sin ni siquiera perdonar al pequeño, que tiene ya el odio instintivo al hombre civilizado".
Domingo Faustino Sarmiento. Argentina, Diario El Nacional del 25/11/1876
"Los pueblos indios además de nuestros problemas específicos tenemos problemas en común con otras clases y sectores populares tales como la pobreza, la marginación, la discriminación, la opresión y explotación, todo ello producto del dominio neocolonial del imperialismo y de las clases dominantes de cada país".
Declaración de Quito, 1992
Hace 523 años el grito proferido por Rodrigo de Triana la madrugada de un 12 de octubre desde su puesto de vigía en el palo mayor de la Pinta informando de la tierra avistada, cambiaría dramáticamente el curso de la historia. Sus repercusiones siguen estando presentes: son, sin más, el cimiento de nuestro mundo actual. Puede decirse sin temor a equivocarnos que el amanecer de ese día comenzó el verdadero proceso de globalización, completado hace unas décadas con la caída del campo socialista con su grito triunfal de “terminó la historia”, siendo al mismo tiempo el ocaso de las civilizaciones americanas originarias.
Más de cinco siglos han pasado desde aquel entonces, y la deuda pendiente no parece llegar a su fin. En un sentido, esa deuda es impagable. ¿Por qué?
El "descubrimiento" de América –eufemísticamente llamado "encuentro de dos mundos"– (lo que, más que encuentro, fue "encontronazo")–, o lo que con más precisión podemos llamar "el inicio del mundo moderno capitalista", es un hecho de una trascendencia sin par en la historia de la Humanidad: inaugura un escenario novedoso que sienta las bases para la universalización de la cultura del imperio dominante, ya a escala planetaria en aquel entonces, mucho más solidificado en la actualidad, cinco siglos después, con la entrada triunfal de las tecnologías de la comunicación e información que vuelven al planeta una verdadera aldea global. El imperio dominante del siglo XVI era el incipiente –pero ya avasallador– capitalismo europeo (representado en ese momento por la España imperial y la Gran Bretaña que se empezaba a industrializar). "Modo de vida occidental", podría llamarse ahora, o libre empresa, o economía de mercado. La llegada de los europeos a tierra americana y su posterior conquista fue la savia vital que alimentó la expansión del capitalismo.
Estas circunstancias de la historia colocan ese encuentro de civilizaciones en la perspectiva de una relación absoluta y radicalmente desigual; en términos estrictos fue más que un "encuentro": fue el sojuzgamiento (sanguinario) de una sobre otra. Fue, en principio, una invasión militar, seguida luego de un avasallamiento cultural. Hubo vencedores y vencidos, sin lugar a dudas, por lo que la idea de "encuentro" es demasiado débil, ingenua en el mejor de los casos. ¡O hipócrita!
El 12 de octubre marca la irrupción violenta de la avidez europea (capitalista) en el mundo, llevándose por delante –religión católica mediante– toda forma de resistencia que se le opusiera, y haciendo de su cultura la única válida y legítima, la presunta "civilización". Lo demás fue condenado al estatuto de barbarie. En tal sentido, entonces, lo que se produce en ese lejano 1492 es, con más exactitud, un encontronazo monumental, sangriento, despiadado. Por cierto, salen mejores parados del mismo los que detentaban la más desarrollada tecnología militar. Y para el caso, fueron los españoles. Al día de hoy, esa relación no ha cambiado en lo fundamental, y de la espada y la cruz pasamos a la dependencia tecnológica y a las impagables deudas externas de nuestros países.
Han pasado 523 años desde aquel grito, y ningún habitante originario del continente americano se siente "descubierto". En realidad no hay nada que festejar el 12 de octubre, no hay "día de la raza" o "día de la hispanidad" que venga a cuento. Hay una historia forjada a sangre y fuego, sigue habiendo una herida abierta, y fundamentalmente hay una deuda no saldada. ¿Quién la va a pagar? ¿Es posible pagarla?
Por otro lado: ¿qué "raza"? La historia la escriben los que ganan, por lo que ese encontronazo de civilizaciones fue contado por los vencedores –los españoles, para el caso, luego los anglosajones en relación a América del Norte– en la forma de "hazaña", de "gesta gloriosa". Los pueblos americanos no tienen la misma versión. No digamos la población negra de África, que más tarde fue transplantada al continente "descubierto" en calidad de mano de obra esclava. ¿Cuál es la proeza en todo ello? Si a alguien benefició todo esto, seguro que no fue ni a los africanos ni a los americanos.
Pero hay algo bien importante: el triunfo de la conquista fue muy grande, y los latinoamericanos seguimos sufriendo hoy "complejo de inferioridad". No es infrecuente ver en cualquier ciudad latinoamericana, o incluso en sus regiones rurales, a algún ciudadano (hombre o mujer) de aspecto aindiado, moreno, en definitiva: no-blanco desde el punto de vista fenotípico, con el cabello teñido de rubio. En esta sufrida región del mundo, para ambientar un programa cultural radial o televisivo, en principio a cualquiera se le podría ocurrir usar música llamada "clásica" (música académica europea de los siglos XVII, XVIII o XIX) y no, seguramente, cumbia o ranchera. Y si se trata de organizar una cena de lujo muy probablemente cualquier habitante latinoamericano pensaría en ofrecer langosta, algún plato con un complicado nombre en francés –aunque no se sepa bien qué es–, lasagna quizá… pero seguro que no arepa, humita ni indio viejo. Y por supuesto, para ir "bien" vestido, un varón debe llevar saco y corbata y una mujer tacones altos con joyas y mucho perfume; sería de "mal gusto" presentarse en güipil o con chaqueta de colores típicos como el actual presidente de Bolivia, Evo Morales. Los palacios gubernamentales, aún rodeados de palmeras y bajo abrasadores soles tropicales, deben tener muchas columnas jónicas y dóricas con amplias escalinatas de mármol como los de los "hombres blancos" del norte, y la juventud "chic" canta en inglés. ¡¿Cómo habría de tararear una canción en guaraní o en mapuche?! Y en diciembre, ¡por supuesto!, los malls (también se puede decir shopping centers) se llenan de pinos plásticos y nieve artificial con un viejo barbudo vestido con trajes de piel (que nunca se sabe de qué se ríe…) y que viaja en trineo (¿trineo para la nieve en nuestros países?). Y si pensamos en pirámides fabulosas, pensamos en las de Egipto, olvidando que en Mesoamérica hay otras tan fantásticas como aquéllas (la más grande del mundo, por cierto, está en Guatemala: El Mirador). Dato marginal: la civilización maya llegó al concepto de número cero hace más de mil años, cuando en Europa se perseguían brujas por herejía. ¿Por qué lo latinoamericano no es "civilizado"? ¿Maldición de Malinche? Ah, por cierto: la "civilizada" Europa aún mantiene reyes. Sí, sí: monarcas, majestades, ¡parásitos que viven lujosamente sin trabajar! ¿Civilización?
Mucho tiempo ha pasado desde la llegada de los europeos al "Nuevo Mundo"; la historia siguió su paso, y de aquel momento inaugural del capitalismo hoy tenemos un Norte desarrollado, opulento, y un Sur que se debate en la pobreza y la dependencia. Por cierto que mucho ha cambiado el mundo en estos más de cinco siglos. Que "la rueda de la historia haya avanzado" es una cuestión abierta que llama a la discusión; para las grandes civilizaciones como la inca, la azteca, la maya, no parece que este "descubrimiento" haya tenido grandes beneficios. Para el capitalismo europeo, fue toral: consistió en su acumulación originaria, su empuje inicial. Sin la conquista de América no podría haber habido capitalismo europeo.
Hoy, 523 años después del grito que comenzaba a cambiar la historia, los pueblos americanos (hay quien los llama "precolombinos"… ¿Antes de Colón? ¿No suena ostentoso eso: antes de Colón no había historia?), no se han recuperado aún del trauma que significó la llegada "del hombre blanco"; de grandes civilizaciones, tan o más desarrollados que los europeos, pasaron a ser mano de obra casi esclava, destruyéndoseles buena parte de su rico acervo cultural, condenados a grupos subalternos. Las empleadas domésticas y los trabajos más mal pagados en cualquier punto de América no lo hacen los blancos.
¿Cómo limpiar esa afrenta histórica?
La historia siguió su curso; la historia oficial, aquella que cuentan los ganadores, intentó borrar esas grandes culturas transformando a sus miembros en ciudadanos de países inventados en estos últimos siglos: los incas pasaron a ser peruanos, los mayas guatemaltecos, los aymarás bolivianos, los aztecas mexicanos, los guaraníes paraguayos, los mapuches chilenos, etc. Las tierras saqueadas en la conquista, los recursos robados y enviados a España –que terminaron enriqueciendo a la emergente industria europea–, los miles y miles de vidas de amerindios segadas, la humillación a que se sometió a los pueblos americanos, la postración histórica a la que se les condenó y de la que hoy, como Tercer Mundo, cuesta tanto remontar… ¿se puede resarcir? ¿Quién lo va a pagar? ¿Cómo? La entrega del Premio Nobel de la Paz a la dirigente maya-quiché Rigoberta Menchú el día del 500 aniversario del inicio de la conquista es un buen gesto, pero no basta.
El 12 de octubre, más que día de festejo (¿qué festejar?) debería ser un día de vergüenza humana.
mmcolussi@gmail.com,
https://www.facebook.com/marcelo.colussi.33
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"¿Lograremos exterminar a los indios? Por los salvajes de América siento una invencible repugnancia sin poderlo remediar. Esa canalla no son más que unos indios asquerosos a quienes mandaría colgar ahora si reapareciesen. (…). Se los debe exterminar sin ni siquiera perdonar al pequeño, que tiene ya el odio instintivo al hombre civilizado".
Domingo Faustino Sarmiento. Argentina, Diario El Nacional del 25/11/1876
"Los pueblos indios además de nuestros problemas específicos tenemos problemas en común con otras clases y sectores populares tales como la pobreza, la marginación, la discriminación, la opresión y explotación, todo ello producto del dominio neocolonial del imperialismo y de las clases dominantes de cada país".
Declaración de Quito, 1992
Hace 523 años el grito proferido por Rodrigo de Triana la madrugada de un 12 de octubre desde su puesto de vigía en el palo mayor de la Pinta informando de la tierra avistada, cambiaría dramáticamente el curso de la historia. Sus repercusiones siguen estando presentes: son, sin más, el cimiento de nuestro mundo actual. Puede decirse sin temor a equivocarnos que el amanecer de ese día comenzó el verdadero proceso de globalización, completado hace unas décadas con la caída del campo socialista con su grito triunfal de “terminó la historia”, siendo al mismo tiempo el ocaso de las civilizaciones americanas originarias.
Más de cinco siglos han pasado desde aquel entonces, y la deuda pendiente no parece llegar a su fin. En un sentido, esa deuda es impagable. ¿Por qué?
El "descubrimiento" de América –eufemísticamente llamado "encuentro de dos mundos"– (lo que, más que encuentro, fue "encontronazo")–, o lo que con más precisión podemos llamar "el inicio del mundo moderno capitalista", es un hecho de una trascendencia sin par en la historia de la Humanidad: inaugura un escenario novedoso que sienta las bases para la universalización de la cultura del imperio dominante, ya a escala planetaria en aquel entonces, mucho más solidificado en la actualidad, cinco siglos después, con la entrada triunfal de las tecnologías de la comunicación e información que vuelven al planeta una verdadera aldea global. El imperio dominante del siglo XVI era el incipiente –pero ya avasallador– capitalismo europeo (representado en ese momento por la España imperial y la Gran Bretaña que se empezaba a industrializar). "Modo de vida occidental", podría llamarse ahora, o libre empresa, o economía de mercado. La llegada de los europeos a tierra americana y su posterior conquista fue la savia vital que alimentó la expansión del capitalismo.
Estas circunstancias de la historia colocan ese encuentro de civilizaciones en la perspectiva de una relación absoluta y radicalmente desigual; en términos estrictos fue más que un "encuentro": fue el sojuzgamiento (sanguinario) de una sobre otra. Fue, en principio, una invasión militar, seguida luego de un avasallamiento cultural. Hubo vencedores y vencidos, sin lugar a dudas, por lo que la idea de "encuentro" es demasiado débil, ingenua en el mejor de los casos. ¡O hipócrita!
El 12 de octubre marca la irrupción violenta de la avidez europea (capitalista) en el mundo, llevándose por delante –religión católica mediante– toda forma de resistencia que se le opusiera, y haciendo de su cultura la única válida y legítima, la presunta "civilización". Lo demás fue condenado al estatuto de barbarie. En tal sentido, entonces, lo que se produce en ese lejano 1492 es, con más exactitud, un encontronazo monumental, sangriento, despiadado. Por cierto, salen mejores parados del mismo los que detentaban la más desarrollada tecnología militar. Y para el caso, fueron los españoles. Al día de hoy, esa relación no ha cambiado en lo fundamental, y de la espada y la cruz pasamos a la dependencia tecnológica y a las impagables deudas externas de nuestros países.
Han pasado 523 años desde aquel grito, y ningún habitante originario del continente americano se siente "descubierto". En realidad no hay nada que festejar el 12 de octubre, no hay "día de la raza" o "día de la hispanidad" que venga a cuento. Hay una historia forjada a sangre y fuego, sigue habiendo una herida abierta, y fundamentalmente hay una deuda no saldada. ¿Quién la va a pagar? ¿Es posible pagarla?
Por otro lado: ¿qué "raza"? La historia la escriben los que ganan, por lo que ese encontronazo de civilizaciones fue contado por los vencedores –los españoles, para el caso, luego los anglosajones en relación a América del Norte– en la forma de "hazaña", de "gesta gloriosa". Los pueblos americanos no tienen la misma versión. No digamos la población negra de África, que más tarde fue transplantada al continente "descubierto" en calidad de mano de obra esclava. ¿Cuál es la proeza en todo ello? Si a alguien benefició todo esto, seguro que no fue ni a los africanos ni a los americanos.
Pero hay algo bien importante: el triunfo de la conquista fue muy grande, y los latinoamericanos seguimos sufriendo hoy "complejo de inferioridad". No es infrecuente ver en cualquier ciudad latinoamericana, o incluso en sus regiones rurales, a algún ciudadano (hombre o mujer) de aspecto aindiado, moreno, en definitiva: no-blanco desde el punto de vista fenotípico, con el cabello teñido de rubio. En esta sufrida región del mundo, para ambientar un programa cultural radial o televisivo, en principio a cualquiera se le podría ocurrir usar música llamada "clásica" (música académica europea de los siglos XVII, XVIII o XIX) y no, seguramente, cumbia o ranchera. Y si se trata de organizar una cena de lujo muy probablemente cualquier habitante latinoamericano pensaría en ofrecer langosta, algún plato con un complicado nombre en francés –aunque no se sepa bien qué es–, lasagna quizá… pero seguro que no arepa, humita ni indio viejo. Y por supuesto, para ir "bien" vestido, un varón debe llevar saco y corbata y una mujer tacones altos con joyas y mucho perfume; sería de "mal gusto" presentarse en güipil o con chaqueta de colores típicos como el actual presidente de Bolivia, Evo Morales. Los palacios gubernamentales, aún rodeados de palmeras y bajo abrasadores soles tropicales, deben tener muchas columnas jónicas y dóricas con amplias escalinatas de mármol como los de los "hombres blancos" del norte, y la juventud "chic" canta en inglés. ¡¿Cómo habría de tararear una canción en guaraní o en mapuche?! Y en diciembre, ¡por supuesto!, los malls (también se puede decir shopping centers) se llenan de pinos plásticos y nieve artificial con un viejo barbudo vestido con trajes de piel (que nunca se sabe de qué se ríe…) y que viaja en trineo (¿trineo para la nieve en nuestros países?). Y si pensamos en pirámides fabulosas, pensamos en las de Egipto, olvidando que en Mesoamérica hay otras tan fantásticas como aquéllas (la más grande del mundo, por cierto, está en Guatemala: El Mirador). Dato marginal: la civilización maya llegó al concepto de número cero hace más de mil años, cuando en Europa se perseguían brujas por herejía. ¿Por qué lo latinoamericano no es "civilizado"? ¿Maldición de Malinche? Ah, por cierto: la "civilizada" Europa aún mantiene reyes. Sí, sí: monarcas, majestades, ¡parásitos que viven lujosamente sin trabajar! ¿Civilización?
Mucho tiempo ha pasado desde la llegada de los europeos al "Nuevo Mundo"; la historia siguió su paso, y de aquel momento inaugural del capitalismo hoy tenemos un Norte desarrollado, opulento, y un Sur que se debate en la pobreza y la dependencia. Por cierto que mucho ha cambiado el mundo en estos más de cinco siglos. Que "la rueda de la historia haya avanzado" es una cuestión abierta que llama a la discusión; para las grandes civilizaciones como la inca, la azteca, la maya, no parece que este "descubrimiento" haya tenido grandes beneficios. Para el capitalismo europeo, fue toral: consistió en su acumulación originaria, su empuje inicial. Sin la conquista de América no podría haber habido capitalismo europeo.
Hoy, 523 años después del grito que comenzaba a cambiar la historia, los pueblos americanos (hay quien los llama "precolombinos"… ¿Antes de Colón? ¿No suena ostentoso eso: antes de Colón no había historia?), no se han recuperado aún del trauma que significó la llegada "del hombre blanco"; de grandes civilizaciones, tan o más desarrollados que los europeos, pasaron a ser mano de obra casi esclava, destruyéndoseles buena parte de su rico acervo cultural, condenados a grupos subalternos. Las empleadas domésticas y los trabajos más mal pagados en cualquier punto de América no lo hacen los blancos.
¿Cómo limpiar esa afrenta histórica?
La historia siguió su curso; la historia oficial, aquella que cuentan los ganadores, intentó borrar esas grandes culturas transformando a sus miembros en ciudadanos de países inventados en estos últimos siglos: los incas pasaron a ser peruanos, los mayas guatemaltecos, los aymarás bolivianos, los aztecas mexicanos, los guaraníes paraguayos, los mapuches chilenos, etc. Las tierras saqueadas en la conquista, los recursos robados y enviados a España –que terminaron enriqueciendo a la emergente industria europea–, los miles y miles de vidas de amerindios segadas, la humillación a que se sometió a los pueblos americanos, la postración histórica a la que se les condenó y de la que hoy, como Tercer Mundo, cuesta tanto remontar… ¿se puede resarcir? ¿Quién lo va a pagar? ¿Cómo? La entrega del Premio Nobel de la Paz a la dirigente maya-quiché Rigoberta Menchú el día del 500 aniversario del inicio de la conquista es un buen gesto, pero no basta.
El 12 de octubre, más que día de festejo (¿qué festejar?) debería ser un día de vergüenza humana.
mmcolussi@gmail.com,
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jueves, 8 de octubre de 2015
Alí Rodríguez Araque, el precio de los huevos y las explicaciones al pueblo
“Siempre es fácil ajustarse hacia arriba, lo difícil es ajustarse hacia abajo” Alí Rodríguez Araque.
Cuando uno lee los artículos de algunos compañeros en los que plantean sus críticas o expresan su perplejidad ante los altos precios que han alcanzado algunos alimentos, algunos podrían pensar que no entienden que estamos en guerra económica o, incluso, que están sucumbiendo tristemente ante la guerra de 4º generación que tanto se ha denunciado y analizado. Algunas de estas denuncias las he escuchado y leído de compañeros como Ronald Muñoz o Juan Martorano. Por ejemplo, este último, el pasado sábado le preguntaba al presidente qué pensaba sobre el precio de los huevos y el dólar paralelo, los cuales ya rozan los mil bolívares.
Y como no es el único militante que se ha hecho este tipo de preguntas, estoy seguro de que podrá tratarse de cualquier cosa menos de un caso de debilidad o traición a la revolución. Más sí, tengo la convicción de que la cuestión aquí estriba en una falta de correspondencia entre el discurso de algunos voceros y funcionarios y la realidad con la que uno se encuentra en la calle. Es decir, pareciera que la dinámica comunicacional del proceso ―catalizada por su puesto por la polarización de la lucha política― generó una suerte de gramática discursiva de la que ahora parece imposible salir por el contraste que esto causaría. Porque al parecer, lo que piden estos militantes de la causa no es otra cosa que información oportuna y esclarecedora sobre algunos aspectos de la economía que se han tornado inquietantes.
Por ejemplo, el caso de los huevos, alimento de primera necesidad por su calidad nutricional, es emblemático. A finales de 2012, un cartón de huevos costaba alrededor de 30 BsF. Hoy, en una venta “popular y solidaria” de los Altos Mirandinos se cotiza en 800 BsF, lo que significa un aumento vertiginoso del 2700%. ¿Cuál es la razón? Mientras el centro de la discusión se centró por algún tiempo en la escasez de la harina de maíz y la leche, algunos rubros de importancia como las mencionadas posturas de gallina, además del tomate, la cebolla y las frutas, parecen haberles decretado liberación Today de su precio. Dada esta situación ¿Qué es lo que espera la gente? Sencillo, explicaciones claras y oportunas, sinceras, sobre qué es lo que está pasando, más allá de la mentada “guerra económica”.
Para corroborar esta opinión, voy a citar a dos veteranos de la política nacional que además son cuadros revolucionarios históricos. El pasado 27 de septiembre, José Vicente Rangel tuvo como invitado al ex “Comandante Fausto” y actual embajador de Venezuela en Cuba, Alí Rodríguez Araque. Después de hacer una caracterización del estado actual de la economía mundial y analizar el tema petrolero, Araque analizó la geopolítica de Venezuela en la región, situación que calificó como “equilibrio inestable”, destacando más lo de equilibrio que lo de inestable. Ahora bien, yendo al tema que nos interesa, el ex canciller de la República analizó nuestra situación económica a la luz de la caída de los precios del crudo.
Con la llegada de Chávez al poder, se recuperaron los precios del petróleo y se acentuó el carácter rentista de nuestra economía. Sin embargo, la Revolución bolivariana planteó y llevó a la práctica un nuevo modelo de distribución de la riqueza en el contexto del nuevo boom de ingreso de petrodólares, lo cual mejoró el poder adquisitivo y el bienestar general de la población. Debido a la baja de los precios del crudo, hoy hemos visto como el ingreso del país ha mermado, dice Araque, por encima del 30%, lo cual obliga a “reordenar la economía”, hacer un nuevo “orden de prioridades”, lo cual comienza por ajustar el presupuesto público. Pero además, agregó Araque, son necesarios “otros ajustes”.
Dejemos ahora que el diálogo ilustre mejor la idea:
JVR: ¿El país tiene que producir?
ARA: Ese es un viejo sueño, porque seguimos dependiendo en grado determinante de la renta, y hay ciertos problemas que sin solución, olvidémonos de que Venezuela va a tener un fuerte ímpetu por ejemplo en el campo de la industria y en otros sectores.
Araque, recordó que desde 1936, año en el que Uslar Pietri publicó su célebre “Sembrar el petróleo”, Venezuela viene “arrastrando” una moneda sobrevaluada. En aquel entonces, cuando Estados Unidos devaluó el dólar, todas las monedas del mundo devaluaron, excepto Venezuela, que no solamente no devaluó sino que sobrevaluó el Bolívar. Pues, esta realidad ha llegado hasta nuestro presente en un contexto donde sincerar el valor de nuestra moneda causaría una crisis de grandes proporciones. Ahora bien, en un escenario semejante, parece que ese conjunto de medidas perentorias y acumuladas ―la situación económica general― merece de parte de quienes manejan la economía del país un mayor esfuerzo pedagógico-comunicacional de cara a la gente.
La lógica es infalible: cae el ingreso, hay menos que distribuir y por tanto empiezan a aparecer problemas en la economía:
ARA: Eso exige, por un lado, en el nivel del Gobierno, hacer las revisiones correspondientes; pero hay que explicarle al pueblo con toda franqueza, con toda crudeza, como ocurre en una familia cuando es necesario restringir el gasto, la nueva situación que estamos viviendo. Hay una nueva situación.
JVR: ¿Se está haciendo?
ARA: ¿Perdón?
JVR: ¿Se está haciendo eso, se está explicando al país eso?
ARA: Usted está aquí en Venezuela y me lo puede explicar mejor.
JVR: Pero tú eres una persona informada.
ARA: Si no se está haciendo, hay que hacerlo.
JVR: Hay que hacerlo, quiere decir que no se está haciendo.
En este punto, Araque fue más enfático, y repitió:
ARA: Si no se está haciendo, hay que hacerlo.
Aquí, cabría decir algo así como “Sin comentarios”, pero no podemos dejar de agregar que lo que está planteando Araque aquí no es menos que una crítica durísima a la forma en que se ha enfocado el tema comunicacional frente a la dura situación económica que vive el país. Así como la gente espera explicaciones sobre las medidas que son necesarias tomar, así a veces uno espera que el ministro de agricultura o economía o finanzas o algún funcionario de la Superintendencia de Precios Justos, nos explique las razones científicas del incremento de los huevos en 2700% en los últimos tres años.
Por otro lado, queremos citar las reflexiones del “Comandante Ramírez”, Fernando Soto Rojas, hechas durante su participación el pasado domingo en el programa Análisis situacional, conducido por el director de Hinterlaces, Óscar Schemel. Tal como lo había planteado Araque, Soto Rojas hizo un llamado a ser sinceros con el pueblo respecto a los problemas del país, añadiendo la necesidad de reconocer públicamente los errores, y ser “autocríticos”. Asimismo, enfatizó que había que definir que lo se va a hacer en lo concreto y en lo real, en el campo agrícola e industrial.
Por supuesto, no está demás aclarar que dichas críticas no sugieren que no se esté haciendo ni comunicando nada. Evidentemente, el Gobierno se ha centrado en destacar que con todo y la merma de los ingresos y la “guerra económica” ―ésta última por cierto no mencionada ni por Fausto ni por Ramírez― se han mantenido los programas sociales, se han seguido entregando canaimitas, inaugurando escuelas, etc. En particular, soy de la idea de que las dificultades económicas se superarán en el mediano plazo. Finalmente, no podemos menos de concluir que hay que seguir trabajando en estas tres áreas prioritarias para el sostenimiento del modelo humanista:
– Una pedagogía de la comunicación en contextos difíciles.
– Superar la mentalidad rentista apoyando y promoviendo las iniciativas creativas en todas las áreas de producción de bienes y servicios, exigiendo las retribuciones correspondientes.
– Ser realmente autocríticos, más allá del discurso y la fraseología.
Publicado ayer en PoderenlaRed.com
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Cuando uno lee los artículos de algunos compañeros en los que plantean sus críticas o expresan su perplejidad ante los altos precios que han alcanzado algunos alimentos, algunos podrían pensar que no entienden que estamos en guerra económica o, incluso, que están sucumbiendo tristemente ante la guerra de 4º generación que tanto se ha denunciado y analizado. Algunas de estas denuncias las he escuchado y leído de compañeros como Ronald Muñoz o Juan Martorano. Por ejemplo, este último, el pasado sábado le preguntaba al presidente qué pensaba sobre el precio de los huevos y el dólar paralelo, los cuales ya rozan los mil bolívares.
Y como no es el único militante que se ha hecho este tipo de preguntas, estoy seguro de que podrá tratarse de cualquier cosa menos de un caso de debilidad o traición a la revolución. Más sí, tengo la convicción de que la cuestión aquí estriba en una falta de correspondencia entre el discurso de algunos voceros y funcionarios y la realidad con la que uno se encuentra en la calle. Es decir, pareciera que la dinámica comunicacional del proceso ―catalizada por su puesto por la polarización de la lucha política― generó una suerte de gramática discursiva de la que ahora parece imposible salir por el contraste que esto causaría. Porque al parecer, lo que piden estos militantes de la causa no es otra cosa que información oportuna y esclarecedora sobre algunos aspectos de la economía que se han tornado inquietantes.
Por ejemplo, el caso de los huevos, alimento de primera necesidad por su calidad nutricional, es emblemático. A finales de 2012, un cartón de huevos costaba alrededor de 30 BsF. Hoy, en una venta “popular y solidaria” de los Altos Mirandinos se cotiza en 800 BsF, lo que significa un aumento vertiginoso del 2700%. ¿Cuál es la razón? Mientras el centro de la discusión se centró por algún tiempo en la escasez de la harina de maíz y la leche, algunos rubros de importancia como las mencionadas posturas de gallina, además del tomate, la cebolla y las frutas, parecen haberles decretado liberación Today de su precio. Dada esta situación ¿Qué es lo que espera la gente? Sencillo, explicaciones claras y oportunas, sinceras, sobre qué es lo que está pasando, más allá de la mentada “guerra económica”.
Para corroborar esta opinión, voy a citar a dos veteranos de la política nacional que además son cuadros revolucionarios históricos. El pasado 27 de septiembre, José Vicente Rangel tuvo como invitado al ex “Comandante Fausto” y actual embajador de Venezuela en Cuba, Alí Rodríguez Araque. Después de hacer una caracterización del estado actual de la economía mundial y analizar el tema petrolero, Araque analizó la geopolítica de Venezuela en la región, situación que calificó como “equilibrio inestable”, destacando más lo de equilibrio que lo de inestable. Ahora bien, yendo al tema que nos interesa, el ex canciller de la República analizó nuestra situación económica a la luz de la caída de los precios del crudo.
Con la llegada de Chávez al poder, se recuperaron los precios del petróleo y se acentuó el carácter rentista de nuestra economía. Sin embargo, la Revolución bolivariana planteó y llevó a la práctica un nuevo modelo de distribución de la riqueza en el contexto del nuevo boom de ingreso de petrodólares, lo cual mejoró el poder adquisitivo y el bienestar general de la población. Debido a la baja de los precios del crudo, hoy hemos visto como el ingreso del país ha mermado, dice Araque, por encima del 30%, lo cual obliga a “reordenar la economía”, hacer un nuevo “orden de prioridades”, lo cual comienza por ajustar el presupuesto público. Pero además, agregó Araque, son necesarios “otros ajustes”.
Dejemos ahora que el diálogo ilustre mejor la idea:
JVR: ¿El país tiene que producir?
ARA: Ese es un viejo sueño, porque seguimos dependiendo en grado determinante de la renta, y hay ciertos problemas que sin solución, olvidémonos de que Venezuela va a tener un fuerte ímpetu por ejemplo en el campo de la industria y en otros sectores.
Araque, recordó que desde 1936, año en el que Uslar Pietri publicó su célebre “Sembrar el petróleo”, Venezuela viene “arrastrando” una moneda sobrevaluada. En aquel entonces, cuando Estados Unidos devaluó el dólar, todas las monedas del mundo devaluaron, excepto Venezuela, que no solamente no devaluó sino que sobrevaluó el Bolívar. Pues, esta realidad ha llegado hasta nuestro presente en un contexto donde sincerar el valor de nuestra moneda causaría una crisis de grandes proporciones. Ahora bien, en un escenario semejante, parece que ese conjunto de medidas perentorias y acumuladas ―la situación económica general― merece de parte de quienes manejan la economía del país un mayor esfuerzo pedagógico-comunicacional de cara a la gente.
La lógica es infalible: cae el ingreso, hay menos que distribuir y por tanto empiezan a aparecer problemas en la economía:
ARA: Eso exige, por un lado, en el nivel del Gobierno, hacer las revisiones correspondientes; pero hay que explicarle al pueblo con toda franqueza, con toda crudeza, como ocurre en una familia cuando es necesario restringir el gasto, la nueva situación que estamos viviendo. Hay una nueva situación.
JVR: ¿Se está haciendo?
ARA: ¿Perdón?
JVR: ¿Se está haciendo eso, se está explicando al país eso?
ARA: Usted está aquí en Venezuela y me lo puede explicar mejor.
JVR: Pero tú eres una persona informada.
ARA: Si no se está haciendo, hay que hacerlo.
JVR: Hay que hacerlo, quiere decir que no se está haciendo.
En este punto, Araque fue más enfático, y repitió:
ARA: Si no se está haciendo, hay que hacerlo.
Aquí, cabría decir algo así como “Sin comentarios”, pero no podemos dejar de agregar que lo que está planteando Araque aquí no es menos que una crítica durísima a la forma en que se ha enfocado el tema comunicacional frente a la dura situación económica que vive el país. Así como la gente espera explicaciones sobre las medidas que son necesarias tomar, así a veces uno espera que el ministro de agricultura o economía o finanzas o algún funcionario de la Superintendencia de Precios Justos, nos explique las razones científicas del incremento de los huevos en 2700% en los últimos tres años.
Por otro lado, queremos citar las reflexiones del “Comandante Ramírez”, Fernando Soto Rojas, hechas durante su participación el pasado domingo en el programa Análisis situacional, conducido por el director de Hinterlaces, Óscar Schemel. Tal como lo había planteado Araque, Soto Rojas hizo un llamado a ser sinceros con el pueblo respecto a los problemas del país, añadiendo la necesidad de reconocer públicamente los errores, y ser “autocríticos”. Asimismo, enfatizó que había que definir que lo se va a hacer en lo concreto y en lo real, en el campo agrícola e industrial.
Por supuesto, no está demás aclarar que dichas críticas no sugieren que no se esté haciendo ni comunicando nada. Evidentemente, el Gobierno se ha centrado en destacar que con todo y la merma de los ingresos y la “guerra económica” ―ésta última por cierto no mencionada ni por Fausto ni por Ramírez― se han mantenido los programas sociales, se han seguido entregando canaimitas, inaugurando escuelas, etc. En particular, soy de la idea de que las dificultades económicas se superarán en el mediano plazo. Finalmente, no podemos menos de concluir que hay que seguir trabajando en estas tres áreas prioritarias para el sostenimiento del modelo humanista:
– Una pedagogía de la comunicación en contextos difíciles.
– Superar la mentalidad rentista apoyando y promoviendo las iniciativas creativas en todas las áreas de producción de bienes y servicios, exigiendo las retribuciones correspondientes.
– Ser realmente autocríticos, más allá del discurso y la fraseología.
Publicado ayer en PoderenlaRed.com
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miércoles, 7 de octubre de 2015
Bernardo Kliksberg: Buenas noticias
En América Latina trabajan diariamente por el bien común, pero no tienen prensa
Solo se hablan de las malas noticias en América Latina. Muy poco de las buenas, como los tres ejemplos que se mencionan a continuación, que indican la capacidad de producir experiencias ejemplares en la región.
Compras en República Dominicana
En la presidencia de Danilo Medina, se adoptó una imaginativa y vigorosa política de compras públicas para la promoción de las micro, pequeñas y medianas empresas, las Mipymes. El gobierno obligó a que de todas las adquisiciones de las organizaciones públicas, el 25% fueran hechas a Mipymes. Se creó un registro de Mipymes certificadas. Se propuso a pequeños productores, muchos informales, formarlas en áreas donde hay importantes compras públicas, y se las capacitó, y preparó técnicamente. El programa está funcionando con todo éxito. Las Mypymes certificadas están aumentando aceleradamente. Se superaron las cifras mandatorias de compra ampliamente. Se generaron muchos empleos decentes, las Mipymes vigorizadas expanden la demanda, ahorran e invierten todo en el país.
Impresoras 3D en México
La impresora 3D es una de las mayores innovaciones tecnológicas actuales. Programada a través de diseños inteligentes, generados computacionalmente, procesa moléculas de hasta ahora 70 sustancias, y produce en tiempos récord, con buena calidad, y a costos reducidos, desde prendas textiles, hasta remedios y muebles. Se pronostica, que se le podrá insertar próximamente moléculas biológicas, e incursionará en campos inéditos. El MIT estableció un programa internacional para entrenar en su manejo, y es libre de patentes.
La Universidad Iberoamericana de Puebla, México, creó un instituto de diseño e innovación orientado a crear oportunidades productivas para las comunidades pobres. Entre sus principales programas se propuso producir impresoras 3D. Ha absorbido las enseñanzas del MIT, y actualmente las está produciendo por su cuenta, a un costo de sólo 2.000 dólares. Está entrenando artesanos, para ser diseñadores inteligentes, manejar 3D y ya están produciendo artesanías digitales.
La nueva generación
Bolsa Familia del Brasil, y Asignación Universal de la Argentina, son hoy referencia internacional. La primera fue clave en la salida de la pobreza de 35 millones de brasileros durante la presidencia Lula. La segunda, protege a los 3,6 millones de niños pobres de la Argentina, y ha logrado resultados sorprendentes en aumentar la matriculación escolar de niños pobres, reducir su deserción, mejorar los indicadores de salud, y la situación del hogar. Sus resultados concretos, llevaron a que aun en un clima de alta pugnacidad política por las elecciones próximas el Congreso aprobara por unanimidad, transformarla en ley. En ambas hay innovaciones que han incidido en su éxito, como el hecho de que son apuestas a la madre, ella recibe las prestaciones y las ha utilizado solo en beneficio de los niños. Se trata de bancarizar a las madres, y se depositan en su cuenta, y entonces no hay ningún intermediario entre el Estado y ellas, se busca empoderarlas con capacitación y acceso a oficios, lo que ha ayudado a quebrar la discriminación de género.
Hay muchos otros ejemplos para mencionar. En América Latina silenciosamente, muchos funcionarios públicos, integrantes de diversas áreas de la sociedad civil, universidades, comunidades religiosas, y otras organizaciones ciudadanas, trabajan a diario por el bien común, pero no tienen prensa.
La nueva obra del autor "La responsabilidad social en acción (comp. con Dalia Silberstein) Ediciones Distal, 2015.
Kliksberg@aol.com / ElUniversal
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Solo se hablan de las malas noticias en América Latina. Muy poco de las buenas, como los tres ejemplos que se mencionan a continuación, que indican la capacidad de producir experiencias ejemplares en la región.
Compras en República Dominicana
En la presidencia de Danilo Medina, se adoptó una imaginativa y vigorosa política de compras públicas para la promoción de las micro, pequeñas y medianas empresas, las Mipymes. El gobierno obligó a que de todas las adquisiciones de las organizaciones públicas, el 25% fueran hechas a Mipymes. Se creó un registro de Mipymes certificadas. Se propuso a pequeños productores, muchos informales, formarlas en áreas donde hay importantes compras públicas, y se las capacitó, y preparó técnicamente. El programa está funcionando con todo éxito. Las Mypymes certificadas están aumentando aceleradamente. Se superaron las cifras mandatorias de compra ampliamente. Se generaron muchos empleos decentes, las Mipymes vigorizadas expanden la demanda, ahorran e invierten todo en el país.
Impresoras 3D en México
La impresora 3D es una de las mayores innovaciones tecnológicas actuales. Programada a través de diseños inteligentes, generados computacionalmente, procesa moléculas de hasta ahora 70 sustancias, y produce en tiempos récord, con buena calidad, y a costos reducidos, desde prendas textiles, hasta remedios y muebles. Se pronostica, que se le podrá insertar próximamente moléculas biológicas, e incursionará en campos inéditos. El MIT estableció un programa internacional para entrenar en su manejo, y es libre de patentes.
La Universidad Iberoamericana de Puebla, México, creó un instituto de diseño e innovación orientado a crear oportunidades productivas para las comunidades pobres. Entre sus principales programas se propuso producir impresoras 3D. Ha absorbido las enseñanzas del MIT, y actualmente las está produciendo por su cuenta, a un costo de sólo 2.000 dólares. Está entrenando artesanos, para ser diseñadores inteligentes, manejar 3D y ya están produciendo artesanías digitales.
La nueva generación
Bolsa Familia del Brasil, y Asignación Universal de la Argentina, son hoy referencia internacional. La primera fue clave en la salida de la pobreza de 35 millones de brasileros durante la presidencia Lula. La segunda, protege a los 3,6 millones de niños pobres de la Argentina, y ha logrado resultados sorprendentes en aumentar la matriculación escolar de niños pobres, reducir su deserción, mejorar los indicadores de salud, y la situación del hogar. Sus resultados concretos, llevaron a que aun en un clima de alta pugnacidad política por las elecciones próximas el Congreso aprobara por unanimidad, transformarla en ley. En ambas hay innovaciones que han incidido en su éxito, como el hecho de que son apuestas a la madre, ella recibe las prestaciones y las ha utilizado solo en beneficio de los niños. Se trata de bancarizar a las madres, y se depositan en su cuenta, y entonces no hay ningún intermediario entre el Estado y ellas, se busca empoderarlas con capacitación y acceso a oficios, lo que ha ayudado a quebrar la discriminación de género.
Hay muchos otros ejemplos para mencionar. En América Latina silenciosamente, muchos funcionarios públicos, integrantes de diversas áreas de la sociedad civil, universidades, comunidades religiosas, y otras organizaciones ciudadanas, trabajan a diario por el bien común, pero no tienen prensa.
La nueva obra del autor "La responsabilidad social en acción (comp. con Dalia Silberstein) Ediciones Distal, 2015.
Kliksberg@aol.com / ElUniversal
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sábado, 3 de octubre de 2015
Carlos Luna Arvelo: Roland se despide de un chavismo que lo raspó
La verdad es que para nada nos extrañó el “Adios al chavismo” de Roland Denis, como seguramente tampoco le extrañó a muchos, ya desde hace bastante tiempo este compa, como el mismo lo confiesa en su Adios, venía despidiéndose.
La visión de Roland acerca de cómo llevar a cabo una revolución ha distado mucho de lo que ha ocurrido en estos 16 años de historia. Sus propias confesiones así lo confirman.
En el plano teórico quizás probablemente este luchador y pensador revolucionario tenga razón. En este terreno quizás haya avanzado de tal forma en la “comprensión” de nuestro contexto histórico social que no es difícil admitir que tiene razón en su propuesta para encaminarnos a una revolución verdadera.
El fracaso de Roland, como de muchos otros de esa vieja izquierda ortodoxa, ocurre cuando sus ideas y planteamientos se trasladan al terreno de los hechos, de la realidad concreta. Y fue en ese terreno precisamente donde el Comandante Chávez, el nuevo “caudillo” ese, en lenguaje rolandeniano, raspó a todos los revolucionarios de estos tiempos.
El chavismo no ha desapareció con la muerte de Chávez, a pesar de los bandazos que ha dado por los avatares a los que se le somete. De haber sido así apenas habría sido un hombre y un nombre el chavismo es más que eso.
El bolivarianismo no desapareció con la derrota política y la muerte física de Bolívar. Después de mucho tiempo en estado de hibernación los ideales del Libertador resurgieron con Chávez para promover una segunda independencia, después de 200 años de iniciada esta gesta.
Las razones de Roland en relación al chavismo son de él y se le respetan, entre ellas esa de la cuenta que le tenía a Chávez por esa soberbia por la que lo “pateó”. Pero las razones del pueblo chavista son del pueblo y eso debe respetarlo Roland. Un pueblo que nunca consideró soberbio a Chávez y que si algo le cuestiona es que le faltó ejercer el caudillismo en favor de los excluidos y los expropiados y en contra de los explotadores.
Posiblemente hace bien Roland en despedirse oficialmente del chavismo, así quizás tenga tiempo para emprender proyectos concretos con comunidades de hombres y mujeres del pueblo en búsqueda de su emancipación. El asunto es que quizás aquí tenga la limitación de que ellos sean “chavistas de corazón”. Más allá de los farsantes, ladrones, mentirosos y traidores que se disfrazan de chavistas y que abunda en la Venezuela de hoy.
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La visión de Roland acerca de cómo llevar a cabo una revolución ha distado mucho de lo que ha ocurrido en estos 16 años de historia. Sus propias confesiones así lo confirman.
En el plano teórico quizás probablemente este luchador y pensador revolucionario tenga razón. En este terreno quizás haya avanzado de tal forma en la “comprensión” de nuestro contexto histórico social que no es difícil admitir que tiene razón en su propuesta para encaminarnos a una revolución verdadera.
El fracaso de Roland, como de muchos otros de esa vieja izquierda ortodoxa, ocurre cuando sus ideas y planteamientos se trasladan al terreno de los hechos, de la realidad concreta. Y fue en ese terreno precisamente donde el Comandante Chávez, el nuevo “caudillo” ese, en lenguaje rolandeniano, raspó a todos los revolucionarios de estos tiempos.
El chavismo no ha desapareció con la muerte de Chávez, a pesar de los bandazos que ha dado por los avatares a los que se le somete. De haber sido así apenas habría sido un hombre y un nombre el chavismo es más que eso.
El bolivarianismo no desapareció con la derrota política y la muerte física de Bolívar. Después de mucho tiempo en estado de hibernación los ideales del Libertador resurgieron con Chávez para promover una segunda independencia, después de 200 años de iniciada esta gesta.
Las razones de Roland en relación al chavismo son de él y se le respetan, entre ellas esa de la cuenta que le tenía a Chávez por esa soberbia por la que lo “pateó”. Pero las razones del pueblo chavista son del pueblo y eso debe respetarlo Roland. Un pueblo que nunca consideró soberbio a Chávez y que si algo le cuestiona es que le faltó ejercer el caudillismo en favor de los excluidos y los expropiados y en contra de los explotadores.
Posiblemente hace bien Roland en despedirse oficialmente del chavismo, así quizás tenga tiempo para emprender proyectos concretos con comunidades de hombres y mujeres del pueblo en búsqueda de su emancipación. El asunto es que quizás aquí tenga la limitación de que ellos sean “chavistas de corazón”. Más allá de los farsantes, ladrones, mentirosos y traidores que se disfrazan de chavistas y que abunda en la Venezuela de hoy.
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Juan González: Ahora si cayó el chavismo, Roland Denis lo decreta y se despide.
Entre el Adios al chavismo de Roland Dennis y Confesiones de un ciego provisional de Eduardo Rothe, me quedo con las confesiones.
Hace tiempo que Roland se despidió del chavismo, aunque sea con este escrito con el que formalmente oficializa su despido, tiempo hace que viene haciendo sus premoniciones del gran fracaso del chavismo, nadie lo pone en duda.
Por otro lado, las “Confesiones” de Eduardo y su extraordinario reconocimiento a la “imperfecta máquina de hacer milagros que llaman Revolución Bolivariana y Socialista”, es apenas un botón de muestra de los múltiples “milagros y maravillas” que en estos 16 años el chavismo contabiliza. Habrá que apostar a que otros beneficiarios como Rothe puedan tener la capacidad de regalarnos en letras sus historias de cómo Chávez, la Revolución, en fin el chavismo le cambiaron sus vidas. No importa lo que dirá Doña Malicia de Derechas y no importa tampoco que tanta gente de la “izquierda histórica” reniegue de la única esperanza que hoy le queda a millones de venezolanos, a pesar de las legítimas reservas que se puedan tener.
Roland en su “Adios”aprovecha para sacarse una vieja espina que tiene con el Comandante, según él por la soberbia de Chávez. Habrá que decirle: soberbia con soberbia se paga.
El autodefinido “luchador popular revolucionario”, concluye que el chavismo murió con Chávez. La misma tesis añeja de la derecha enemiga del pueblo y de la revolución. Antes de esta conclusión, a la que tanto le costó llegar según confiesa, dice que Chávez al no romper con la condición de caudillo que las circunstancias le impusieron mantuvo un poder que le rodeaba y al que le tuvo más miedo que a la propia muerte. Pero remata sus elucubraciones confesando que hay un “fondo metafísico” que no entiende, que le faltan datos o que su incomprensión puede deberse a su imbecilidad.
El conocido Dr. Lupa,por otro lado, logra trasmitirnos en su poética confesión, apenas hablándonos de una de las tantas Misiones que creó Chávez, la convicción de que el chavismo está vivo y tiene vigencia a pesar de los reveses. Habla Rothe por millones de hombres y mujeres beneficiarios de una utopía que en campos de salud, educación, vivienda, etc. han evidenciado que otro mundo es posible.
Adios le decimos a Roland, respetamos su derecho a perder la fe en un sueño en el que a mayoría de pobres no han dejado de creer. Un saludo fraterno a Rothe que ahora ve más claro que nunca y que sigue comulgando con una esperanza que es la de millones.
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Hace tiempo que Roland se despidió del chavismo, aunque sea con este escrito con el que formalmente oficializa su despido, tiempo hace que viene haciendo sus premoniciones del gran fracaso del chavismo, nadie lo pone en duda.
Por otro lado, las “Confesiones” de Eduardo y su extraordinario reconocimiento a la “imperfecta máquina de hacer milagros que llaman Revolución Bolivariana y Socialista”, es apenas un botón de muestra de los múltiples “milagros y maravillas” que en estos 16 años el chavismo contabiliza. Habrá que apostar a que otros beneficiarios como Rothe puedan tener la capacidad de regalarnos en letras sus historias de cómo Chávez, la Revolución, en fin el chavismo le cambiaron sus vidas. No importa lo que dirá Doña Malicia de Derechas y no importa tampoco que tanta gente de la “izquierda histórica” reniegue de la única esperanza que hoy le queda a millones de venezolanos, a pesar de las legítimas reservas que se puedan tener.
Roland en su “Adios”aprovecha para sacarse una vieja espina que tiene con el Comandante, según él por la soberbia de Chávez. Habrá que decirle: soberbia con soberbia se paga.
El autodefinido “luchador popular revolucionario”, concluye que el chavismo murió con Chávez. La misma tesis añeja de la derecha enemiga del pueblo y de la revolución. Antes de esta conclusión, a la que tanto le costó llegar según confiesa, dice que Chávez al no romper con la condición de caudillo que las circunstancias le impusieron mantuvo un poder que le rodeaba y al que le tuvo más miedo que a la propia muerte. Pero remata sus elucubraciones confesando que hay un “fondo metafísico” que no entiende, que le faltan datos o que su incomprensión puede deberse a su imbecilidad.
El conocido Dr. Lupa,por otro lado, logra trasmitirnos en su poética confesión, apenas hablándonos de una de las tantas Misiones que creó Chávez, la convicción de que el chavismo está vivo y tiene vigencia a pesar de los reveses. Habla Rothe por millones de hombres y mujeres beneficiarios de una utopía que en campos de salud, educación, vivienda, etc. han evidenciado que otro mundo es posible.
Adios le decimos a Roland, respetamos su derecho a perder la fe en un sueño en el que a mayoría de pobres no han dejado de creer. Un saludo fraterno a Rothe que ahora ve más claro que nunca y que sigue comulgando con una esperanza que es la de millones.
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viernes, 2 de octubre de 2015
Manuel E. Yepe: Una democracia de los ricos para los ricos
“Por primera vez en la historia, el Congreso está dominado por una mayoría de millonarios que son, como promedio, catorce veces más ricos que el estadounidense medio… nuestros representantes están totalmente desconectados de la lucha diaria de la mayoría de los estadounidenses, que viven -de un cheque a otro- atrapados en la agotadora lucha por sobrevivir día a día”.
Así lo observa John W. Whitehead, Presidente del Instituto Rutherford, en su libro “A Government of Wolves: The Emerging American Police State” (“Un gobierno de lobos: el estado policial estadounidense que emerge”).
“De hecho, aunque se supone que Estados Unidos sea una república representativa, estas personas ganan salarios de seis cifras y habitan un mundo exento de multas, con gimnasio gratuito y atención sanitaria
que no es segunda de nadie, sólo tienen que trabajar dos o tres días a la semana; hacen 32 viajes por carretera completamente reembolsados cada año, viajan al exterior, reciben descuentos en restaurantes y
están exentos de impuestos en las tiendas de Capitol Hill, con aparcamiento reservado en el aeropuerto nacional de Washington, floresfrescas gratuitas en los jardines botánicos y asistencia también gratuita en la preparación de sus informes de impuestos sobre la renta. Ellos ni representan ni sirven al pueblo estadounidense. En vez de eso, se han autoproclamado nuestros amos”.
Según informa Dan Eggen en el diario The Washington Post: "las nuevas cifras ponen de relieve una larga tendencia de acumulación de riqueza en el Congreso, que está integrado mayoritariamente por millonarios y
casi millonarios que poseen a menudo varias casas y otros bienes fuera del alcance de la mayoría de los votantes que representan".
“Muchos de nuestros políticos viven como reyes. Pasean en lujosas limusinas, vuelan en aviones privados y consumen comidas gourmet, todo pagado por los contribuyentes estadounidenses, bien alejados de
aquellos a quienes se supone que representen. Por su lujoso estilo de vida, resulta difícil identificarles con el ciudadano común que vive cheque a cheque y mantiene al país con su dinero duramente ganado con el sudor de su frente”.
Como escribe el renombrado economista Joseph Stiglitz en la revista Vanity Fair, “prácticamente todos los senadores de Estados Unidos y la mayoría de los representantes de la cámara, integran el 1 por ciento
cuando llegan, son protegidos en sus cargos por el dinero del 1 por ciento y saben que si sirven bien al 1 por ciento serán recompensados por el 1 por ciento cuando dejen sus cargos. Por lo general, las
autoridades claves del poder ejecutivo en materia de política comercial y económica también integran el 1 por ciento.
Lamentablemente, dice Whitehead, la política electoral ha sido tan profundamente corrompida por el dinero corporativo que hay pocas posibilidades de que, incluso una persona bien intencionada, pueda
promover un cambio real en el Congreso. El camino de las urnas, ya sea a la Oficina Oval o al Congreso, es caro, y sólo los ricos, o aquellos apoyados por los ricos, son capaces de llegar siquiera a la línea de partida.
En el ciclo de las elecciones presidenciales de 2012, ambas partes gastaron mil millones de dólares para intentar obtener la elección de sus candidatos.
Una vez electos, estos burócratas ricos ya privilegiados entran en una vida de privilegio aún mayor, vergonzosamente a expensas de los contribuyentes estadounidenses. Ya sean demócratas o republicanos,
todos ellos aprovechan al máximo lo que un informe de prensa describe como "una montaña de ventajas con las que la mayoría de las fortunas mayores del mundo no podrían rivalizar".
Incluso los consejeros más cercanos del Presidente Obama son millonarios, los de su gabinete de quince miembros incluidos. Y luego están los grupos de presión (lobbys), con un estimado 26 cabilderos
por congresista, fuente de mucha corrupción y trasiego de dinero en Washington.
Esta presión, dice Whitehead, es alentada a su vez por un estilo de vida del Congreso que exige que los congresistas pasen la mayor parte de su tiempo recaudando fondos para campañas, en vez de respondiendo a las necesidades de sus electores. “Cuando la mitad de su tiempo la dedican a pedir dinero a individuos ricos y a otros intereses especiales, no hay manera que puedan responder a los problemas que están presentes en el país”.
Según el representante demócrata por Carolina del Norte Brad Miller, “a lo que nos enfrentamos es a un gobierno oligárquico, uno de los ricos, por los ricos y para los ricos. Si nos propusiéramos la
supervivencia de nuestro supuesto gobierno representativo, lo primero que debíamos hacer es arrebatar su control de la élite adinerada que lo dirige”.
Setiembre 30 de 2015
http://manuelyepe.wordpress.com/
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Así lo observa John W. Whitehead, Presidente del Instituto Rutherford, en su libro “A Government of Wolves: The Emerging American Police State” (“Un gobierno de lobos: el estado policial estadounidense que emerge”).
“De hecho, aunque se supone que Estados Unidos sea una república representativa, estas personas ganan salarios de seis cifras y habitan un mundo exento de multas, con gimnasio gratuito y atención sanitaria
que no es segunda de nadie, sólo tienen que trabajar dos o tres días a la semana; hacen 32 viajes por carretera completamente reembolsados cada año, viajan al exterior, reciben descuentos en restaurantes y
están exentos de impuestos en las tiendas de Capitol Hill, con aparcamiento reservado en el aeropuerto nacional de Washington, floresfrescas gratuitas en los jardines botánicos y asistencia también gratuita en la preparación de sus informes de impuestos sobre la renta. Ellos ni representan ni sirven al pueblo estadounidense. En vez de eso, se han autoproclamado nuestros amos”.
Según informa Dan Eggen en el diario The Washington Post: "las nuevas cifras ponen de relieve una larga tendencia de acumulación de riqueza en el Congreso, que está integrado mayoritariamente por millonarios y
casi millonarios que poseen a menudo varias casas y otros bienes fuera del alcance de la mayoría de los votantes que representan".
“Muchos de nuestros políticos viven como reyes. Pasean en lujosas limusinas, vuelan en aviones privados y consumen comidas gourmet, todo pagado por los contribuyentes estadounidenses, bien alejados de
aquellos a quienes se supone que representen. Por su lujoso estilo de vida, resulta difícil identificarles con el ciudadano común que vive cheque a cheque y mantiene al país con su dinero duramente ganado con el sudor de su frente”.
Como escribe el renombrado economista Joseph Stiglitz en la revista Vanity Fair, “prácticamente todos los senadores de Estados Unidos y la mayoría de los representantes de la cámara, integran el 1 por ciento
cuando llegan, son protegidos en sus cargos por el dinero del 1 por ciento y saben que si sirven bien al 1 por ciento serán recompensados por el 1 por ciento cuando dejen sus cargos. Por lo general, las
autoridades claves del poder ejecutivo en materia de política comercial y económica también integran el 1 por ciento.
Lamentablemente, dice Whitehead, la política electoral ha sido tan profundamente corrompida por el dinero corporativo que hay pocas posibilidades de que, incluso una persona bien intencionada, pueda
promover un cambio real en el Congreso. El camino de las urnas, ya sea a la Oficina Oval o al Congreso, es caro, y sólo los ricos, o aquellos apoyados por los ricos, son capaces de llegar siquiera a la línea de partida.
En el ciclo de las elecciones presidenciales de 2012, ambas partes gastaron mil millones de dólares para intentar obtener la elección de sus candidatos.
Una vez electos, estos burócratas ricos ya privilegiados entran en una vida de privilegio aún mayor, vergonzosamente a expensas de los contribuyentes estadounidenses. Ya sean demócratas o republicanos,
todos ellos aprovechan al máximo lo que un informe de prensa describe como "una montaña de ventajas con las que la mayoría de las fortunas mayores del mundo no podrían rivalizar".
Incluso los consejeros más cercanos del Presidente Obama son millonarios, los de su gabinete de quince miembros incluidos. Y luego están los grupos de presión (lobbys), con un estimado 26 cabilderos
por congresista, fuente de mucha corrupción y trasiego de dinero en Washington.
Esta presión, dice Whitehead, es alentada a su vez por un estilo de vida del Congreso que exige que los congresistas pasen la mayor parte de su tiempo recaudando fondos para campañas, en vez de respondiendo a las necesidades de sus electores. “Cuando la mitad de su tiempo la dedican a pedir dinero a individuos ricos y a otros intereses especiales, no hay manera que puedan responder a los problemas que están presentes en el país”.
Según el representante demócrata por Carolina del Norte Brad Miller, “a lo que nos enfrentamos es a un gobierno oligárquico, uno de los ricos, por los ricos y para los ricos. Si nos propusiéramos la
supervivencia de nuestro supuesto gobierno representativo, lo primero que debíamos hacer es arrebatar su control de la élite adinerada que lo dirige”.
Setiembre 30 de 2015
http://manuelyepe.wordpress.com/
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Sembrar el petróleo: reflexiones sobre el "excremento del diablo"
Preocupado por el papel creciente que el ingreso por concepto de renta petrolera estaba desempeñando en la economía del país, Uslar Pietri escribió su conocido editorial “Sembrar el petróleo”. En el artículo, el pensador advierte que esta renta podría “llegar a hacer de Venezuela un país improductivo y ocioso, un inmenso parásito del petróleo, nadando en una abundancia momentánea y corruptora y abocado a una catástrofe inminente e inevitable.
En 1936, año en que Uslar hizo su planteamiento, evidentemente no se tenía idea de la cantidad de petróleo que había bajo tierras venezolanas. De ahí que se refiera al aceite negro como una “abundancia momentánea”, considerando que estaba claro desde aquella época su carácter de hidrocarburo no renovable. Hoy, sabemos que Venezuela alberga las reservas petroleras más grandes del mundo, y que desde los años 30 hasta la actualidad, el país ha disfrutado de épocas en las que los altos precios del “oro negro” en el mercado internacional, han generado ingresos estratosféricos súbitos que le han permitido importar a discreción casi cualquier producto o servicio cual Estado mágico capaz de sacar cualquier cosa de su sombrero, diría Coronil.
Si bien hoy sabemos que la riqueza petrolera no era tan momentánea, la idea de que vivimos en un país “improductivo y ocioso”, de que nos fuimos convirtiendo en “un inmenso parásito del petróleo”, constituye un tema que no puede tener más vigencia. En los últimos meses, el mundo ha sido testigo de la reducción drástica de los precios internacionales del petróleo debido a varios factores, coyuntura que ha afectado en primer lugar a los países productores como Venezuela. Luego de un precio que se mantuvo estable alrededor de los 100$ el barril en los últimos años, este se precipitó hasta los 40$. Es decir, nuestro ingreso ha mermado en un 60%, lo cual ha impactado sensiblemente nuestra economía.
Uslar Pietri, en aquel momento hizo una serie de propuestas:
“Urge crear sólidamente en Venezuela una economía reproductiva y progresiva. Urge aprovechar la riqueza transitoria de la actual economía destructiva para crear las bases sanas y amplias y coordinadas de esa futura economía progresiva que será nuestra verdadera acta de independencia. Es menester sacar la mayor renta de las minas para invertirla totalmente en ayudas, facilidades y estímulos a la agricultura, la cría y las industrias nacionales. Que en lugar de ser el petróleo una maldición que haya de convertirnos en un pueblo parásito e inútil, sea la afortunada coyuntura que permita con su súbita riqueza acelerar y fortificar la evolución productora del pueblo venezolano en condiciones excepcionales.”
Pero esa “evolución productora del pueblo venezolano” no se dio en los años sucesivos, y los planes para sustituir las importaciones no tuvieron mucho éxito, en un contexto de dependencia tecnológica donde al mismo tiempo se descubrían nuevos yacimientos del preciado hidrocarburo, acentuándose la monoproducción. Solo hoy, encontrándonos en una difícil situación por la caída de los precios, la política industrializadora parece haberse retomado con seriedad y nuevos bríos.
En la actualidad, en medio de la compleja situación que atravesamos, economistas como Víctor Álvarez han dicho recientemente:
“La falta de divisas sentencia que ya no es posible importar para abastecer la demanda nacional. Los crecientes problemas de escasez que atormentan a la población y ponen en peligro el resultado electoral que al gobierno le interesa lograr, reivindican la importancia de industrializar la economía nacional para alcanzar la soberanía alimentaria y productiva.”
Más adelante, agrega: “Solo a través de un esfuerzo sostenido por industrializar la economía nacional será posible derrotar los flagelos de la escasez y la inflación que azotan a la población.”
Tanto Uslar como Álvarez coinciden en la necesidad de industrializar, de usar los recursos en época de abundancia para promover la agricultura y la manufactura, para así diversificar la economía. Álvarez, apunta además una serie de medidas económicas complementarias y simultáneas, en función de los nuevos enfoques de la economía moderna.
Sigue siendo un alto desafío, acostumbrados como estamos a ser parásitos del petróleo. Sin embargo, la tecnología moderna y la consciencia que hoy se tiene de este histórico lastre nos permite, haciendo un inventario de todo lo anterior, plantear tres significados de la frase sembrar el petróleo. Esta, nos habla de un esfuerzo que hay que hacer en la siembra de la semilla necesaria para que esta nos provea, con el tiempo, de los preciados frutos del trabajo. Solo que hablamos de una semilla que es de las más difíciles de sembrar.
De tal manera, sembrar el petróleo, para nosotros significa, aparte de industrializar para producir nuestros alimentos y artefactos:
1- Industrializar el petróleo: La petroquímica y su tremendo potencial.
2- Invertir en las energías alternativas, en todas sus formas y posibilidades.
3- Dejar gran parte de esas inmensas reservas petroleras bajo la tierra. (La mejor manera de sembrarlo).
El petróleo se convierte en “excremento del diablo” (Pérez Alfonzo), cuando la economía de un país depende, en casi todas sus letras, de su explotación.
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En 1936, año en que Uslar hizo su planteamiento, evidentemente no se tenía idea de la cantidad de petróleo que había bajo tierras venezolanas. De ahí que se refiera al aceite negro como una “abundancia momentánea”, considerando que estaba claro desde aquella época su carácter de hidrocarburo no renovable. Hoy, sabemos que Venezuela alberga las reservas petroleras más grandes del mundo, y que desde los años 30 hasta la actualidad, el país ha disfrutado de épocas en las que los altos precios del “oro negro” en el mercado internacional, han generado ingresos estratosféricos súbitos que le han permitido importar a discreción casi cualquier producto o servicio cual Estado mágico capaz de sacar cualquier cosa de su sombrero, diría Coronil.
Si bien hoy sabemos que la riqueza petrolera no era tan momentánea, la idea de que vivimos en un país “improductivo y ocioso”, de que nos fuimos convirtiendo en “un inmenso parásito del petróleo”, constituye un tema que no puede tener más vigencia. En los últimos meses, el mundo ha sido testigo de la reducción drástica de los precios internacionales del petróleo debido a varios factores, coyuntura que ha afectado en primer lugar a los países productores como Venezuela. Luego de un precio que se mantuvo estable alrededor de los 100$ el barril en los últimos años, este se precipitó hasta los 40$. Es decir, nuestro ingreso ha mermado en un 60%, lo cual ha impactado sensiblemente nuestra economía.
Uslar Pietri, en aquel momento hizo una serie de propuestas:
“Urge crear sólidamente en Venezuela una economía reproductiva y progresiva. Urge aprovechar la riqueza transitoria de la actual economía destructiva para crear las bases sanas y amplias y coordinadas de esa futura economía progresiva que será nuestra verdadera acta de independencia. Es menester sacar la mayor renta de las minas para invertirla totalmente en ayudas, facilidades y estímulos a la agricultura, la cría y las industrias nacionales. Que en lugar de ser el petróleo una maldición que haya de convertirnos en un pueblo parásito e inútil, sea la afortunada coyuntura que permita con su súbita riqueza acelerar y fortificar la evolución productora del pueblo venezolano en condiciones excepcionales.”
Pero esa “evolución productora del pueblo venezolano” no se dio en los años sucesivos, y los planes para sustituir las importaciones no tuvieron mucho éxito, en un contexto de dependencia tecnológica donde al mismo tiempo se descubrían nuevos yacimientos del preciado hidrocarburo, acentuándose la monoproducción. Solo hoy, encontrándonos en una difícil situación por la caída de los precios, la política industrializadora parece haberse retomado con seriedad y nuevos bríos.
En la actualidad, en medio de la compleja situación que atravesamos, economistas como Víctor Álvarez han dicho recientemente:
“La falta de divisas sentencia que ya no es posible importar para abastecer la demanda nacional. Los crecientes problemas de escasez que atormentan a la población y ponen en peligro el resultado electoral que al gobierno le interesa lograr, reivindican la importancia de industrializar la economía nacional para alcanzar la soberanía alimentaria y productiva.”
Más adelante, agrega: “Solo a través de un esfuerzo sostenido por industrializar la economía nacional será posible derrotar los flagelos de la escasez y la inflación que azotan a la población.”
Tanto Uslar como Álvarez coinciden en la necesidad de industrializar, de usar los recursos en época de abundancia para promover la agricultura y la manufactura, para así diversificar la economía. Álvarez, apunta además una serie de medidas económicas complementarias y simultáneas, en función de los nuevos enfoques de la economía moderna.
Sigue siendo un alto desafío, acostumbrados como estamos a ser parásitos del petróleo. Sin embargo, la tecnología moderna y la consciencia que hoy se tiene de este histórico lastre nos permite, haciendo un inventario de todo lo anterior, plantear tres significados de la frase sembrar el petróleo. Esta, nos habla de un esfuerzo que hay que hacer en la siembra de la semilla necesaria para que esta nos provea, con el tiempo, de los preciados frutos del trabajo. Solo que hablamos de una semilla que es de las más difíciles de sembrar.
De tal manera, sembrar el petróleo, para nosotros significa, aparte de industrializar para producir nuestros alimentos y artefactos:
1- Industrializar el petróleo: La petroquímica y su tremendo potencial.
2- Invertir en las energías alternativas, en todas sus formas y posibilidades.
3- Dejar gran parte de esas inmensas reservas petroleras bajo la tierra. (La mejor manera de sembrarlo).
El petróleo se convierte en “excremento del diablo” (Pérez Alfonzo), cuando la economía de un país depende, en casi todas sus letras, de su explotación.
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