sábado, 3 de octubre de 2015

Juan González: Ahora si cayó el chavismo, Roland Denis lo decreta y se despide.

Juan_gonzalez_ahora_si_cayo_el_chavismo_roland_denis_decreta
Entre el Adios al chavismo de Roland Dennis y Confesiones de un ciego provisional de Eduardo Rothe, me quedo con las confesiones.

Hace tiempo que Roland se despidió del chavismo, aunque sea con este escrito con el que formalmente oficializa su despido, tiempo hace que  viene haciendo sus premoniciones del gran fracaso del chavismo, nadie lo pone en duda.

Por otro lado, las “Confesiones” de Eduardo y su extraordinario  reconocimiento a la “imperfecta máquina de hacer milagros que llaman Revolución Bolivariana y Socialista”, es apenas un botón de muestra de los múltiples “milagros y maravillas” que en estos 16 años el chavismo contabiliza. Habrá que apostar a que otros beneficiarios como Rothe puedan tener la capacidad de regalarnos en letras sus historias de cómo Chávez, la Revolución, en fin el chavismo le  cambiaron  sus vidas. No importa lo que dirá Doña Malicia de Derechas y no importa tampoco que tanta gente de la “izquierda histórica” reniegue de la única esperanza que hoy le queda a millones de venezolanos, a pesar de las legítimas  reservas que se puedan tener.
Roland en su “Adios”aprovecha para sacarse una vieja espina que tiene con el Comandante, según él por la soberbia de Chávez. Habrá que decirle: soberbia con soberbia se paga.

El autodefinido “luchador popular revolucionario”, concluye que el chavismo murió con Chávez. La misma tesis  añeja de la derecha enemiga del pueblo y de la revolución. Antes de esta conclusión, a la que tanto le costó llegar según confiesa, dice que Chávez al no romper con la condición de caudillo que las circunstancias le impusieron mantuvo un poder que le rodeaba y al que le tuvo más miedo que a la propia muerte. Pero remata sus elucubraciones confesando que hay un “fondo metafísico” que no entiende, que le faltan datos o que su incomprensión puede deberse a su imbecilidad.

El conocido Dr. Lupa,por otro lado, logra trasmitirnos en su poética confesión, apenas hablándonos de una de las tantas Misiones que creó Chávez, la convicción de que el chavismo está vivo y tiene vigencia a pesar de los reveses. Habla Rothe por millones de hombres y mujeres beneficiarios de una utopía que en campos de salud, educación, vivienda, etc. han evidenciado que otro mundo es posible.

Adios le decimos a Roland, respetamos su derecho a perder la fe en un sueño en el que a mayoría de pobres no han dejado de creer. Un saludo fraterno a Rothe que ahora ve más claro que nunca y que sigue comulgando con una esperanza que es la de millones.

Volver al Home

No hay comentarios:

Publicar un comentario